Violencia alcanza a aficionados de Gallos Blancos durante el fin de semana
Un aficionado del equipo queretano fue herido con arma blanca mientras volvía de presenciar un encuentro con el Pachuca, su vida no corre peligro
Foto: Archivo
El pasado 4 de noviembre se repitió una historia más de agresión en el mundo del futbol: un aficionado del equipo Gallos Blancos fue herido con arma blanca en un pulmón. Aunque su vida no corre riesgo, según autoridades, se encuentra delicado de salud.
Este hecho se presentó el pasado fin de semana cuando se disputó un partido entre Gallos y Pachuca, en Hidalgo; de regreso a la entidad, los aficionados del equipo plumífero tuvieron una riña con aficionados de Monterrey, quienes salían del partido en el que se enfrentó a Puebla.
En redes sociales, a través de la cuenta de Twitter @ZonaGallos denunciaron que “se dio una agresión a chavos que asistieron a Pachuca a apoyar al equipo de #GallosBlancos; los agresores fueron aficionados del equipo Monterrey que venían de Puebla, del partido vs Lobos BUAP”.
El joven herido, de nombre Michel, fue traslado posteriormente al Hospital General de la entidad para recibir la atención correspondiente. Por este hecho no existe reporte de detenidos.
Este caso se suma al del conocido “Tortillas”, quien en 2012 fue detenido por el delito de homicidio y lesiones dolosas en agravio de dos personas, luego de un enfrentamiento entre aficionados del equipo de futbol América y habitantes de la comunidad de El Colorado, en el municipio de El Marqués, tras haberse llevado a cabo un partido entre el América y los Gallos Blancos de Querétaro.
Luego de estar tres años en prisión, un juez absolvió de estos delitos a José Miguel Urbina Franco, al no contar con elementos suficientes de prueba.
Pero aunado a estos casos se encuentran cientos más en el país, uno de ellos, por ejemplo, concluyó con la detención de 15 personas y tres heridos tras una pelea entre aficionados de los equipos deportivos Xolos y Club León, o la batalla campal entre seguidores de los clubes América y Pumas en California, Estados Unidos.
Los incidentes se han dejado ver también entre mismos aficionados o con los elementos de seguridad privada que resguardan los encuentros deportivos y en los que, no tan comúnmente, pierde la vida alguno de los asistentes.
