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Central Park, una cadena de omisiones

Por Karen Munguía - 24/09/2016

En el complejo residencial y de servicios no solo hay tomas clandestinas de agua, sino que existen muchas deficiencias en infraestructura y seguridad

 Central Park, una cadena de omisiones

Además de las tomas clandestinas de agua, y de los adeudos de predial, el complejo habitacional y comercial Central Park, incumple con numerosas reglamentaciones en los que se refiere a infraestructura y medidas de seguridad.

El estacionamiento de Central Park es un espacio donde las medidas de seguridad son, a simple vista, ignoradas y que ocasionan malestar entre los trabajadores y dueños de las oficinas, por ejemplo, de la torre 2 de este lujoso complejo habitacional, comercial y empresarial.

De acuerdo con el Reglamento de la Coordinación Municipal de Protección Civil de la capital, algunas de las medidas de seguridad con las que debe contar un estacionamiento son, entre otras, tener extintores y botes de arena, señalética, ruta, plan de evacuación y una instalación eléctrica dictaminada por un profesional en la materia.

Este mismo reglamento, en el capítulo X “De las medidas de seguridad”, fracción I, se establece que habrá una suspensión de cinco días de actividades comerciales, industriales, de servicios y las relacionadas con la construcción, en obras e instalaciones que pongan en riesgo a la población. Si concluida la vigencia de esta medida el riesgo continúa, se podrán dictar nuevamente las medidas que sean necesarias para proteger a la población.

Códice Informativo realizó un recorrido por este espacio donde son notables las condiciones en las que se encuentra, por ejemplo, el estacionamiento, y que en temporada de lluvia se encharca por las goteras; además de que tiene cables por fuera del concreto, amarrados con cinta de aislar.

La recepción y el elevador lucen bien, pero si éste se descompone, no queda de otra más que tomar las escaleras, que también son un riesgo. Los desarrolladores de esta torre empresarial dejaron los tubos de agua y cables de luz fuera del concreto, instalaron medidores en pésimas condiciones y colocaron letreros con la leyenda “100 por ciento libres de humo de tabaco”, aunque hay colillas de cigarro depositadas en los tubos sueltos que quedaron.

No todo queda ahí, si alguien de repente va distraído, puede correr el riesgo de caerse o perder algún objeto pues hay un espacio de más de 15 centímetros entre cada descanso de las escaleras.

Central Park no sólo enfrenta problemas legales por incumplir la ley, sino que cuenta con un estacionamiento que no cuenta con las medidas de seguridad adecuadas, mientras que decenas de trabajadores y condóminos corren riesgo permanente al vivir, o trabajar, en un complejo residencial con oficinas con un valor que rebasa el millón de pesos, pero que cuenta con mínimas medidas de seguridad.

Al respecto, Fernando Martínez Garza, director de protección civil de Querétaro, señaló las medidas básicas de seguridad con las que debe contar un estacionamiento.

Además, indicó que es importante que el personal esté capacitado en primeros auxilios y sepa cómo actuar en combate de incendios o evacuación. A simple vista, no hay extintores y tampoco una instalación eléctrica adecuada en el estacionamiento ni en las escaleras de, al menos, la torre 2.

Por incumplir contar con las medidas básicas de seguridad, las sanciones van desde una amonestación, a una multa de 20 a 20 mil días de salario mínimo vigente en la región, buscando proporcionalidad y equidad. En caso de reincidencia la autoridad podrá incrementar la multa, sin perjuicio de la responsabilidad penal en que incurra el infractor por desobediencia a un mando legítimo de autoridad; así como la clausura o suspensión total o parcial, de actividades o servicios.

Todo parte del tamaño del estacionamiento, te voy a poner un ejemplo, si es un estacionamiento que mide más de tres mil metros cuadrados, es un inmueble de alto riesgo y se le piden algunos dictámenes, si es un estacionamiento que mide menos de 300 metros cuadrados se convierte diferente, cambia el grado de riesgo por el número de vehículos estacionados y la cantidad de gente”, explicó Martínez Garza.

Cabe recordar que el pasado 8 de julio fueron clausurados los edificios corporativos I y II de este complejo por haber omitido hacer el pago del impuesto predial por más de nueve millones de pesos, además de que no contaban con licencia municipal de funcionamiento vigente.

 


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