La Procesión del Silencio en Querétaro
Más de mil asistentes recorrieron calles del centro histórico
Con fe y esperanza se realizó este viernes la edición número 48 de la Procesión del Silencio en el convento de La Cruz, hasta donde llegaron más de mil personas provenientes de este templo y otros como Soriano, Santa Ana y San Agustín, en una ceremonia que estuvo llena de color y devoción.
Desde muy temprano los participantes y cientos de fieles se congregaron alrededor del templo, en calles como Felipe Luna, 5 de mayo, Pasteur, Reforma, Ángela Peralta y Corregidora para admirar a las asociaciones, hermandades y cofradías que participaron en el evento, el cual inició en punto de las 18:00 horas.
Esta celebración que inició en 1968, comenzó con la participación de cerca de 40 personas, para que este año el número creciera a mil, con la participación de las diferentes hermandades como las del Señor de la columna, del Señor nazareno, del Señor de la cañita, del Señor de esquipulas, de la Madre de los dolores, de San Juan, del señor del Santo Entierro, de la Santa Cruz de los milagros y de la Asociación del señor de la Piedad; más otros templos como Santa Ana y El Retablo.
Con capuchas de diferentes colores, de negro, gris, rojo y púrpura, cada hermandad acompañaba a Cristo en su dolor, en donde el significado de esta ceremonia es emular la pasión de Jesucristo hasta su muerte, ya que a decir del vicario, en ella sólo se habló lo necesario.
El recorrido regresó al templo de La Cruz, mientras en las calles, los asistentes, de todas las edades, admiraban con fe el sacrificio de unos cuantos en memoria de Cristo.