Papa Francisco viajará a Brasil en julio próximo
El Pontífice se reunió este miércoles con patriarcas ecuménicos, encuentros que son calificados como históricos
El Papa Francisco viajará a Brasil en julio próximo, según lo que el mismo Pontífice dijo a la presidenta de ese país sudamericano, Dilma Rousseff, a quien confirmó su asistencia a la Jornada Mundial de la Juventud.
En una audiencia celebrada la mañana de este miércoles en la que recibió a la mandataria brasileña, el Obispo de Roma confirmó su presencia en la Jornada Mundial de la Juventud, que tendrá lugar en Río de Janeiro del 25 al 28 de julio, lo que podría ser el primer viaje internacional de su Pontificado.
El Papa también expresó a Rousseff su deseo de visitar la ciudad de Aparecida, donde se encuentra el santuario mariano más grande de Brasil.
En otras audiencias, Jorge Mario Bergoglio se reunió también con los delegados de las diferentes comunidades eclesiales cristianas y con los representantes de diferentes religiones que asistieron el martes a la misa de inauguración de su Pontificado.
En ese encuentro, el jefe de la Iglesia Católica les pidió promover la reconciliación y construir la paz.
“La Iglesia Católica es consciente de la importancia que tienen la promoción de la amistad y el respeto entre los hombres y mujeres de diversas tradiciones religiosas. (…) Podemos hacer mucho por el bien de quien es más pobre, de quien es débil y sufre, para favorecer la justicia, promover la reconciliación y construir la paz”, enfatizó el Papa argentino.
En su alocución, Bergoglio hizo también un llamado a la unidad a las comunidades cristianas y les aseguró la firme voluntad de continuar en el camino del diálogo.
Asimismo, el sucesor de Benedicto XVI invitó a los representantes judíos a “proseguir proficuamente aquel diálogo fraterno que el Concilio Vaticano II deseaba, y que se ha realizado efectivamente, trayendo muchos frutos, especialmente en el curso de los últimos decenios”.
Minutos antes de esta reunión, el Papa Francisco se reunió por separado con el Patriarca Ecuménico Bartolomeo y con el Metropolitano Hilarión, del Patriarcado de Moscú. Estos encuentros son históricos ya que desde el Cisma de Oriente, un Patriarca ortodoxo no había participado nunca en una misa de inicio de Pontificado.
