Bombero lesionado en San Francisquito pide ayuda a Calzada
Denuncia que el secretario de Gobierno y el Procurador le han negado ayuda
Al término de la ceremonia de los honores a la bandera, Juan Carlos Córdoba Sánchez, bombero que sufrió fuertes quemaduras al atender una fuga de gas en un hogar de la colonia San Francisquito, se plató frente al gobernador del estado, José Calzada Rovirosa, para pedirle apoyo.
En entrevista, aseguró que el titular de la Secretaría de Gobierno, Jorge López Portillo Tostado y el Procurador general de justicia, Arsenio Durán Becerra se lo han negado y hasta lo han juzgado.
Ante diversos medios de comunicación, expresó que lo que exige es que la empresa gasera pague la cirugía -que asciende a un monto de 200 mil pesos- un costo que está fuera de su alcance puesto que gana 5 mil 200 pesos al mes.
El bombero sufrió quemaduras en sus manos el pasado 13 de abril, cuando atendió una fuga de gas de un tanque en mal estado, que estalló; y con el afán de proteger al ama de casa se atravesó, arriesgando su vida.
“En vez de ayudarme me dice que yo tuve la culpa, me juzga, él mismo me dijo -el secretario de Gobierno- si necesitas ayuda yo lo juzgaré; o sea, qué tipo de gente tiene, por eso me acerque a él yo directamente.
“Igual la Procuraduría dice que yo tuve la culpa del accidente, a mí el Procurador me lo dijo, es que tú tuviste la culpa, me cae que si yo quisiera salir corriendo, no salvaría a la señora pero con mi cuerpo yo la cubrí, ella esta vivita y coleando ¿eso es tener la culpa?”, recalcó.
Córdoba Sánchez manifestó que López Portillo Tostado, en reiteradas ocasiones, se comprometió a intervenir en su caso para que la empresa respondiera por las lesiones que sufrió, sin embargo, hasta la fecha no ha cumplido con su palabra.
Al mismo tiempo, señaló que desde hace varias semanas interpuso una demanda penal contra la empresa por lesiones, adicional a la que presentó la señora afectada quien lo hizo por lesiones y daños a la propiedad, aunque dijo que el proceso sigue estancado.
El motivo por el que responsabiliza a la gasera, se debe a que el tanque era del año 1998, cuando la ley de llenado de tanques de gas dice que éstos deben ser renovados cada cinco años.
Finalmente, se expresó preocupado puesto que no recuperó la movilidad en sus manos y el tiempo de incapacidad terminó este domingo, además que dejó de recibir terapias de rehabilitación el pasado viernes.