Jugadores marcados por el consumo del clembuterol
No es la primera ocasión que jugadores de futbol son acusados por el consumo de esta sustancia en pruebas antidopaje
Luego de algunos años sin que hubiera problemas de dopaje en el fútbol mexicano este 2013 nuevamente se registran dos casos, una vez más por consumo de clembuterol, en un debate que pudiera ventilar un problema de salud pública emanado desde el deporte.
Corría apenas el año 2011 cuando antes de competir por la Copa Oro, los jugadores de la Selección Mexicana Christian Bermúdez, Édgar Dueñas, Antonio Naelson (brasileño naturalizado mexicano), Guillermo Ochoa y Francisco Javier Rodríguez arrojaron positivo en consumo de la sal prohibida.
Tras la investigación, todos ellos fueron liberados de culpa debido a que se detectó que el consumo de la sustancia había sido de manera involuntaria por ingesta de carne y esta situación marcó un parteaguas ante los organismos sancionadores ya que meses más adelante se presentaría un caso masivo que requirió la intervención de organismos internacionales de dopaje.
En ese mismo 2011, durante el Mundial Sub 17 celebrado en México, 109 jugadores de las distintas selecciones participantes arrojaron positivo por clembuterol. La FIFA y la WADA, enteradas del problema, decidieron no castigar a ninguno de los jugadores.
Fue en ese caso cuando el médico de la FIFA, Jiri Dvorak, aseguró que no había indicio alguno de que existiera dopaje sistemático por la Federación Mexicana de Futbol, aunque se mostró preocupado por el número de casos.
Este 2013, después de dos años sin casos de doping, la Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol investiga a Omar Arellano y Luis Madrigal del Monterrey; Luis Fernando Silva y Jorge Zárate de Morelia; Manuel Madrid y Jesús Corona de Cruz Azul, y Marco Jiménez y Amaury Escoto, de Gallos Blancos de Querétaro como posibles casos positivos de doping tras las pruebas realizadas en la jornada uno.