Organizaciones presentan queja ante DDHQ por la no promulgación de la ley antitabaco
Le piden al gobernador José Calzada cuantifique los beneficios de no contar con una ley que espacios 100 por ciento libres de humo de tabaco
Diversas organizaciones, entre las que destaca Salud y Género A.C, presentaron de manera formal una queja ante la Defensoría de los Derechos Humanos del estado de Querétaro (DDHQ), por lo que consideran una omisión del Poder Ejecutivo al no publicar la ley antitabaco de Querétaro.
Ha pasado exactamente un año desde la aprobación en el pleno de la LVII Legislatura la Ley que Regula los Espacios 100 por ciento Libres de Humo de Tabaco. El Poder Ejecutivo del estado de Querétaro no ha dado trámite a su publicación en el periódico oficial “La Sombra de Arteaga”, luego de que José Calzada Rovirosa rechazara parcialmente su contenido, argumentando siete observaciones en las que destaca el perjuicio económico que tendría para el estado el que no se permita fumar en espacios de convivencia.
Gisela de Jesús Sánchez Díaz de León, directora de Salud y Género A.C, pidió al gobernador del estado de Querétaro que responda a los llamados de las organizaciones civiles, y al menos cuantifique el beneficio económico que ha tenido Querétaro en el año en el que se ha negado a publicar la ley, pues aseguró que la sociedad civil sí tiene cuantificados los daños que el tabaco causa a la salud pública.
“A un año, queremos preguntarle. Nosotros sí sabemos cuántas muertes hubo, 844 cuando menos. Que nos diga, como no nos ha respondido le hemos enviado muchas cartas, ustedes se dieron cuenta que de un año para acá le hemos enviado muchas cartas. Siete organizaciones internacionales le enviaron una carta que nunca contestó, entregamos más de mil firmas pidiendo que se publicara la ley y tampoco nunca nos contestó”, recordó Sánchez Díaz de León.
La activista recordó que de acuerdo con el Sistema Nacional de Información en Salud (Sinais), en 2011 la prevalecencia de fumadores entre 13 y 15 años era la más alta del país, con un 18.6 por ciento de fumadores entre el universo de niños de ese rango de edad.
Además, en Querétaro fallecen al año 844 personas por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, generando un costo a la salud pública superior a los 446 millones de pesos.
“Si no llegamos a la recomendación, por lo menos que nos responda cuáles fueron los beneficios en ese año, cuánto ganó Querétaro, cuántos trabajos se sostuvieron con la industria tabacalera, cuántos millones de pesos. Y aun cuando fueran muchos millones de pesos, nosotros sostenemos que los intereses económicos no están por encima de la salud”, sentenció.
Gisela Díaz Sánchez de León recordó que la industria tabacalera, en todo el mundo, cabildea con los gobiernos y los legisladores para evitar que se reduzca institucionalmente el consumo de tabaco, y aunque afirmó no tiene constancia de ello, sí puede presumirse que dada la negatividad que el gobierno del estado tiene en cuanto a la publicación de dicha ley, la industria tabacalera ha movido influencias para evitar que la normatividad antitabaco se haga realidad, a pesar de estar ya aprobada.