Otra más de doña Elvia, la presidenta municipal de Ezequiel Montes

El éxito de la gobernabilidad – gobernanza – es permitir, asegurar, que el gobernante, sea este federal, estatal o municipal, haga justo lo que el ciudadano ordena. Sin muchos rodeos.

Por eso a los Presidentes de la República o de los municipios, se le llama “mandatarios”. Y mandatario no es el que manda, sino el que es mandado. Y lo manda el ciudadano, porque es precisamente el que le paga su salario, a través de sus impuestos.

Esto viene a colación por la reunión del viernes pasado que los ganaderos del municipio de Ezequiel Montes tuvieron con el senador Mauricio Kuri González, quién en los términos que marca la ley, viene cumpliendo la promoción de su Primer Informe Legislativo.

Y lo hace de dos maneras. La primera en un evento realizado en el Teatro Metropolitano de la capital queretana, en donde congregó al menos a unas 2 mil 500 personas, de todo los sectores y clases sociales, con la presencia interesante de senadores de su partido, de diputados, de diversos alcaldes no solo del PAN, sino también independientes, precisamente para informar lo realizado en la Cámara de Senadores – es ahí coordinador del PAN – y fijar posicionamientos de porqué si o porque no, fueron votados tales o cuales iniciativas de ley.

Y la otra.

Viene cumpliendo en estos días diversas reuniones con grupos de comerciantes, de agricultores, de ganaderos, entre otros muchos que está realizando. Ahora mismo anda por los municipios de la Sierra Gorda.

Pues bien, el pasado viernes, a invitación de los señores ganaderos de esa municipalidad, es que acude a informarles estos avances legislativos, pero también a escuchar su problemática, la que en forma nacional reciente ese sector ahora mismo, por la serie de recortes que el gobierno federal ha dispuesto en los apoyos que recibía.

Con esto, si bien la situación del productor de carne o lechero siempre ha sido muy complicada, con estos recortes el golpeteo es ahora inmisericorde.

Los ganaderos no atraviesan y con este gobierno federal, precisamente época de bonanza.

Y si, ahí salió.

Además del retiro de estos apoyos – lo cual son sumamente graves y por demás lamentables – sucede que a la presidenta municipal, a Doña Elvia Montes Trejo, se le ocurrió hacer una “propuesta” – “que no impuesto” según su personal decir – a los ganaderos de aquella municipalidad.

Y hace su “propuesta” justo en estos momentos de dificultades y apremio para el sector, en lugar de buscar apoyos gubernamentales – tal y como lo esté realizando el gobernador – para paliar los tiempos difíciles por los que pasa.

Bueno, lo cierto es que esta plática de los ganaderos con el senador Kuri le molestó tanto a la dama, que ese mismo día en la tarde sale a fijar su posicionamiento.

Y es que la Presidenta Municipal es bien conocida precisamente por las imposiciones, no por el dialogo con sus gobernados. Así lo hizo con los prestadores de servicios – hoteleros, restauranteros, comerciantes – de Bernal, con el aumento no consultado de las licencias municipales del año que está por terminar.

Y la prueba de esto fueron las diversas manifestaciones de estos grupos – Bernal vive del turismo – en abierto rechazo a estas disposiciones. No es cierto que negoció. Vamos, ni siquiera avisó.

Y su proceder – dicen los que la conocen de años – no es de ahora, sino que la dama “está impuesta mandar”, desde aquellos tiempos en que, por el PRI en el 2006, aspiró a ser candidata a presidenta municipal. No aceptó, precisamente por su carácter, que el partido le asignará como regidores a varios priistas. “No acepto imposiciones” fue su decir en aquél entonces. Afloró, como ahora, su personal soberbia.

Y esa actitud no es precisamente producto del dialogo.

Dice que las puertas de la presidencia están abiertas, tanto para el senador como para el regidor Israel Pérez Montes. Si, por supuesto, que lo haga con el regidor de Acción Nacional – por ahí debió de haber comenzado – y no ahora que vuelve a imponer decisiones de una manera unilateral.

Además, toda fijación de aportaciones realizadas desde el gobierno municipal, son impuestos, no aportaciones voluntarias. Aquellos – los impuestos – necesariamente requieren dela aprobación del H. Ayuntamiento. Y ratificadas por los señores diputados de esta LIX. “Aportaciones voluntarias” esas solo se dan en misa. En los gobiernos se llaman “impuestos”.

A estos tiempos difíciles de los ganaderos, la señora – no el Ayuntamiento – está proponiendo una aportación de 5 a 10 pesos por cabeza. O sea que cada tráiler cargado de ganado, además de las licencias sanitarias que deben de cubrir, deberán los ganaderos desembolsar algo así como 250 pesos. ¿Y para qué son estos impuestos? Ella lo sabe, los ganaderos no.

Pero hay más.

Cita también al diálogo al senador Mauricio Kuri. Y este, el municipal, no es el ring del señor legislador. Las peleas y las propuestas las hace no con la señora presidenta, sino entre sus pares, en la Cámara de Senadores. Por eso seguramente no le tomará la palabra.

Hable, presidenta, con sus regidores, con los ganaderos. Y se lo digo, con todo el respeto que me merece por su condición de mujer. Busque al regidor del PAN, que es lo que primeramente debió haber hecho. Y como la reunión con Kuri fue en su municipio, debió asistir a recibirlo, por lo menos. Y ya ahí si los ganaderos le invitaban a integrarse, se hubiera logrado algún acuerdo.

El éxito de la gobernanza se alcanza a través del diálogo, no de imposiciones.

Así, a los hoteleros, a los restauranteros, a los comerciantes – tampoco a los ganaderos, que ya le rebotó – “ni los ve ni los oye”.

Otra más de la señora presidenta, doña Elvia Montes Trejo.