Miguel Ángel Patiño Aboytes o el Demonio de Tasmania…

-“…Doctor buenos días”, saludó sonriente el oficial mayor de Corregidora al malencarado presidente municipal (así, con minúsculas) Miguel Ángel Patiño Aboytes.

-“Doctor,  hoy es día de la secretaria y aparte de pedirte que pases a todos los escritorios a saludarlas, te informo que les compre una flor a cada una y fueron 200 pesos, las compré en la florería de frente a Banamex”.

El ladino edil se atusó el bigote de jicote aguamielero y alzando una ceja le pregunto a su colaborador: “¿y mis 20 pesos,Toño?”.

– “Perdón Miguel Ángel, no te entiendo”, balbuceó con azoro el empleado;

– “Sí Toño, mis 20 pesos del 10% que me toca de cada compra que se haga en la administración…”

Toño, aún con gesto de incredulidad, sacó su cartera y de ésta extrajo los 20 pesos que exigía el munícipe…

– “Toño -sentenció con gesto adusto, el edil de marras-, requerimos comprar varios autos para los secretarios, pero VW pues no quiero que el gobernador me llame la atención por gastar en lujos innecesarios, o peor aún, que Alejandro Espinoza me recorte o retenga las ministraciones; te voy a pedir que busques con alguna agencia que nos pueda vender 3 autos pero que facture con valor más alto y la diferencia del precio me la entreguen en efectivo”.

– “Oye Doctor, pero es meternos en una bronca, si esto se sabe”.

– “Pues busca la manera, para eso los tengo”.

Y sí, hubo quien hiciera la venta y le entregara al prevaricador el sobreprecio de la compra…

Una mañana en el privado del edil, la secretaria, por el teléfono, le aviso que su papá, ex alcalde de Corregidora, estaba con unas personas afuera y deseaba verlo; el hamponcillo bajó los pies del escritorio y dejo de retorcer el mostacho -costumbre que realizaba cuando cavilaba alguna nueva tropelía que le dejara dinero de los contribuyentes-.

– “Que pase Silvia, por favor tráiganos café”.

Entró su padre seguido de 3 personas, todos socios del ejido El Pueblito, una extensión de tierra muy considerable y que era administrada en comunidad ejidal.

– “Fíjate, hijo, que se nos amoló la bomba del pozo y pues urge repararla, y ahorita no hay dinero en tesorería…”

– “¿Cuánto cuesta papá?

– “Pues 20 mil pesos y nos la reparan en 3 días”, contesto el progenitor, quien entrecerró los ojillos borrosos, imaginando de inmediato el jugoso negocio que se presentaba.

– “Silvia, llama a Alex que venga de inmediato”.

En 3 minutos estaba el tesorero frente a su jefe…

– “Mira, haz un documento que sea recibo por el apoyo brindado a ejido El Pueblito para reparar la bomba del pozo de agua que lo abastece, y lo haces por 50 mil pesos, lo traes a que lo firmen los señores y generas el cheque, que lo endosen y lo mandas cobrar de inmediato para que los señores no pierdan tiempo, pues urge esa reparación…”

– “Sí doctor, enseguida”… y en cuestión de 45 minutos se robo 30 mil pesos con todo descaro…

Debo relatarles que sus dos primeras medidas como edil fueron las siguientes: ordenar que a su papa se le diera una pick up Ford blanca modelo 1993, una de las 2 que había financiado el Banco Mundial como parte del equipamiento del relleno sanitario, que también financiaba en parte importante y que su antecesor Hilario Zuñiga, no había podido concluir en su periodo. Es claro que la camioneta la entrego a su padre para su uso personal, y sí, la uso los 3 años en que desgobernó Corregidora.

La segunda acción que realizó el primer lunes de su desgraciado mandato, fue estafar a un proveedor que perforaba pozos en Corregidora, de nombre Manuel Ochoa; la administración anterior le quedo a deber una cantidad fuerte y el “curapulques de marras” lo cito en el California de Zaragoza y ahí, sin pudor alguno, le espetó que si quería cobrar tendría que darle a él 100 mil pesos o que se pasaría los 3 años siguientes litigando su pago y lo que haría Patiño sería dejar la deuda al siguiente edil.

Ochoa se enojó, le reclamo y el “ladroncete impretérito” no cedió un ápice; no le quedo más remedio a su víctima que sacar la chequera y darle ese dinero, de inmediato le habló a su jefe de las policía, antiguo empleado bancario, a quien instruyó pasara por el cheque y fuera a la caja Libertad a abrirle una cuenta…

Lo anterior, son pinceladas para pintar de cuerpo entero a un sujeto deleznable que solo por esas carambolas del destino y la miopía política de Enrique Burgos y la falta de investigación de Jesús Rodríguez, permitieron fuera candidato en lugar de su hermana Marisa, ella sí con trayectoria en el PRI; ella sí, dotada para la política, pero… embarazada; y ahí fue donde, para desgracia de corregidorenses, la hembra porcina sufrió un escorzo en el apéndice trasero; la mamá de los Patiño, señora de fuerte carácter y talento, disuadió a su hija para que cediera la candidatura al hombre de la casa, al heredero de su padre; hablara con Régulo Cortés y éste disuadiera a Burgos de que Jaime Miguel Ángel debía ser el candidato; el padre convenció a los ex presidentes y éstos hicieron frente común, a cambio de futuras prebendas, para convencer a Burgos de la unidad política en Corregidora en torno a Miguel Ángel…

La campaña arrancó 1 semana tarde, porque el candidato “curapulques” no tenía dinero para iniciar; fue el empresario Abraham González Contreras quien le dio un cheque de 50 mil pesos y le prestó 3 celulares; Juan Almaraz, a la sazón presidente del PRI, le o ó 16 mil pesos y unos pósters y la bendición; no era el torpe candidato santo de la devoción de Juan; la campaña fue desordenada y el candidato pasaba las tardes dormido en el sillón de la casa paterna, dejaba eventos y solo maquinaba como sacar raja económica de la campaña.

Así ideo una rifa de un Chevy, rifa fraudulenta que arrojó un ganador: él mismo, se quedó con el auto y lo vendió a un familiar… se quedó con dinero que le dieron para la campaña y… ganó, claro le ayudaron en gobierno del estado a través de la maquinaria priista que aún funcionaba bien por los triunfos del sexenio salinista; y para fortuna del prevaricador, faltaban 5 meses para el error de diciembre.

Hoy, 2015, después de un proceso de 18 años donde le quitaron propiedades y tuvo que devolver dinero al erario, ha librado este juicio que parecía eterno; al parecer la voluntad política de alguien poderoso pudo más que el agravio a tanta gente de Corregidora; quizá esa misma mano poderosa que lo llevó al IMSS como… !asesor médico!

Imagine usted, !asesor médico!, si señor; quienes lo conocemos desde 1972 sabemos que como galeno ejerció quizá 2 años en pueblos perdidos de Jalisco, para luego llegar a Querétaro como el hijo prodigo, literalmente, y entonces cambio de profesión y se dedicó a chofer de taxi, hasta que la diosa fortuna, veleidosa siempre, lo colocó de candidato; el día que protesto como tal, llegó manejando su taxi y de ahí en adelante su vida cambió…

Hoy este sujeto está incrustado en la campaña de Javier Ortega, a través de Patricia Narváez Delgadillo, su pareja sentimental, quien integra la fórmula de cabildo de Ortega; esta persona se involucró con él cuando era alcalde y obtuvo cargo de directora de Atención Ciudadana, desde donde manejaba la agenda de Patiño y… cometía peculado contra la administración: ella tenía una imprenta que quebró, pero Patiño Aboytes le indicó que no diera de baja fiscalmente y así podría mes tras mes facturar al municipio trabajos de imprenta que nunca se realizaron, los montos iban de los 10 a los 50 mil pesos mensuales durante el último año de gestión.

La relación prospero y el abusivo edil indicó al abogado externo del ayuntamiento que arreglara el divorcio de la señora Narváez y que los honorarios, gastos y costas que generará el hecho jurídico, los cargara al municipio; fue tan descarado que este hecho, el divorcio, fue tema y consta en actas, de una sesión de cabildo, donde los regidores panistas convenientemente “maiceados” doblaron las manitas y aceptaron que la tesorería pagara el divorcio de la “nueva señora del señor presidente”.

Los intentos del “ladroncete” de insertar en la vida pública a su señora han sido varios, y de esos afanes podría dar razón José Parcero López a la sazón coordinador de campaña de Fernando Ortiz Arana; claro, si Pepe Parero no estuviera prófugo….

Sería prolijo narrar todas las pillerías del prevaricador, lo que aquí le cuento son apenas pinceladas; de todo ello hay testigos irrefutables… quiero suponer que aún se lamentan Ana Bertha Silva Solórzano y Andrés Garrido Del Toral por haber librado de la cárcel a tan connotado ladrón, cuando su sucesora Blanca Pérez Buenrostro lo quiso llevar a juicio por peculado y abuso de poder…

De su voracidad puede dar cuenta José Antonio Urquiza Estrada, suegro de Ricardo Astudillo, cuando fraccionó Huertas El Carmen II; quien ya no puede dar cuenta de el amago de extorsión o voracidad sin límites, es José Oleskovski, cuando fraccionaba Parque Industrial Balvanera con vivienda social y a quien Patiño exigió 16 casas, lo que provocó que el empresario lo amenazara con decirle a su amigo Enrique Burgos del intento de despojo por parte del edil; se tuvo que conformar con 3 viviendas…

Este es el “ciudadano intachable” que colabora y apoya $$$ a Javier Ortega, político a quien tengo por hombre decente, él sí de familia digna y bien avenida; estoy cierto que Javier debe abrir los ojos y saber de quién se rodea…

Por supuesto que todo esto escrito líneas arriba me consta, y como dije: hay testigos indubitables, ¿verdad, mi estimado Prisciliano Olvera?

Por supuesto reto a Patiño Aboytes a que desmienta lo aquí narrado….

Les espero de lunes a viernes de 8:30-10:00 am en mi noticiario Raúl Moreno en la Noticia por radioonce.mx, periodismo en libertad.