“La historia nos juzgará”, responde rectora a acusaciones de violencia institucional

“Historia nos juzgará”, así respondió la rectora Teresa García Gasca a las acusaciones de corrupción y violencia institucional vertidas por la mayor parte de los candidatos que aspiran a sucederla como cabeza de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).

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Por un lado, recordó que estas acusaciones de violencia institucional, así como de “represalias” han sido constantes inclusive desde el paro estudiantil contra la violencia de género, y reconoció que el análisis de los protocolos de la Unidad de Atención a la Violencia de Género (Uavig) están en revisión ante los análisis que consideran falta de perspectiva en derechos humanos.

“Habría que ver a qué se refieren específicamente, porque se ha trabajando en el fortalecimiento para erradicar la violencia. Habrá que ver si se refieren al trato particular de una oficina, o mecanismos perceptibles. Se debía que la Uavig misma tiene mecanismos que no observan bien los derechos humanos y de hecho tienen un par de meses sus protocolos en revisión”, explicó.

Por otro lado, rechazó que haya corrupción en su administración y aseguró que se trataría de “errores” que se deberían a los cambios de la política educativa federal y a los imprevistos en las auditorías, pero aseguró que su administración dará cuentas tanto a su sucesor o sucesora como a la sociedad.

“La historia nos juzgará. Vamos a entregar cuentas y lo que hemos hecho. Cada área enterrará a sus homólogos para dejarlo. No hay nada escondido, hay un portal de transparencia. La UAQ es transparente. Podemos tener errores, pero no hemos cometido acciones con dolo”.

Cabe recordar que, tanto la directora de la Facultad de Medicina, Guadalupe Lelo de Larrea, como Martin Vivanco de Contaduría y Administración, acusaron intromisión en el proceso. Este último, se bajó de la candidatura a rector después de una denuncia de plagio en su tesis de maestría que, acusó, habría sido orquestada por la administración central.

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La última acusación vino ayer por parte de Marcela Ávila Eggleton, directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, quien aseguró que la administración central ha sido “indolente” y no ha respondido a las acusaciones que se le han hecho por parte de la comunidad universitaria.

“Venimos de una administración que en muchos sentidos ha sido omisa y en este sentido requerimos diligencia para reconstruir la universidad que queremos, (…); finalmente venimos de una administración que ha sido indolente, que ha sido sorda a muchos de los cuestionamientos y de las exigencias de la comunidad y tenemos que transitar hacia el diálogo y la participación activa de todos”