¿Qué irregularidades encontró Reuters en los contratos de Pemex?
La reconocida agencia de noticias internacional muestra con casos concretos la corrupción que existe en la petrolera mexicana
México mira hacia otro lado mientras contratistas despluman a la petrolera Pemex, tituló la agencia de noticias Reuters a su reportaje especial sobre las irregularidades en contratos que otorga la petrolera mexicana. Actos de corrupción que quedan al descubierto, pero que no generan acciones enérgicas por parte del gobierno mexicano.
Elinor Comlay, Mica Rosenberg y M.B Pell comandan dicha investigación, en la que dan cuenta del pago de nueve millones de dólares por parte de Pemex, en el 2011, por remolcar una plataforma petrolera desde Emiratos Árabes Unidos hasta el Golfo de México.
“La plataforma tenía el equipo equivocado para el contrato, de acuerdo con un reporte de una auditoría del Congreso. Y el traslado en sí era una ficción: la plataforma no necesitaba ser movida porque ya estaba en el Golfo de México”, señala el reporte especial.
Pemex, de acuerdo con Reuters, no hizo nada al respecto a pesar de la advertencia de los auditores. Un año después, la plataforma en cuestión explotó en un incidente en el murieron dos trabajadores. Pemex sigue investigando la causa del accidente.
“Reuters identificó más de 100 contratos firmados entre el 2003 y el 2012 por un valor de 11,700 millones de dólares sobre los que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) de la Cámara de Diputados hizo señalamientos después de detectar irregularidades”.
Las irregularidades, señala la agencia informativa, van desde “sobrecotizaciones de trabajos de mala calidad” hasta “fraude descarado”. Estos contratos representan un 8 por ciento del total de 149 mil millones de pesos que ha repartió Pemex entre 2003 y 2012.
“Los problemas de Pemex para fiscalizarse a sí mismo tienen además importancia internacional. La producción de petróleo de México está cayendo y en un esfuerzo por revertir esto el país está a punto de abrir sus reservas de petróleo a extranjeros. Pemex casi siempre desestima esas advertencias. Del 2008 al 2012, el año más reciente para los que hay datos disponibles, los auditores del Congreso emitieron 274 recomendaciones para que la empresa estatal tomara medidas sobre las irregularidades en los contratos, como presentar una denuncia, medidas disciplinarias o tratar de recuperar parte del dinero. Pemex respondió a 268 de los casos, pero en sólo tres de ellos tomó medidas, como suspender a un puñado de empleados”.
Aunque en la teoría los auditores de Pemex son independientes y responden a otro organismo federal, lo cierto es que muchos de ellos están contratados por la propia petrolera, pues paga sus sueldos y alberga sus oficinas.
“El fraude y el despilfarro en Pemex son críticos debido al papel que tiene la empresa en la economía mexicana. Los impuestos y derechos que paga Pemex financian alrededor del 30 por ciento del presupuesto federal. El abuso en los contratos en el gigante petrolero tienen directa incidencia en el margen de maniobra que tiene el Gobierno para financiar desde servicios de salud hasta la construcción de caminos”, agrega el reportaje.
Aunque Pemex no se expresó directamente sobre los contratos que el reportaje menciona, Arturo Hernández, director de Procura y Abastecimiento, señaló que los actos de corrupción han existido “en el pasado”, pero ya están en camino los cambios necesarios para evitar que esto sucede, haciendo referencia a la Reforma Energética.
“Los problemas de Pemex para fiscalizarse a sí mismo tienen además importancia internacional. La producción de petróleo de México está cayendo y en un esfuerzo por revertir esto el país está a punto de abrir sus reservas de petróleo a extranjeros. Citigroup dijo en febrero del año pasado que fue defraudado por más de 400 millones de dólares por un importante contratista de Pemex que utilizó facturas falsas de la petrolera para garantizar créditos del banco”, señala Reuters, en referencia al fraude de Oceanografía.
En otro contrato irregular, Pemex Petroquímica autorizó la venta de un químico llamado acrilonitrilo, con un gran descuento desde el 2009 al 2011, a la empresa Unigel Química, que ganó más de 30 millones de dólares con el acuerdo, mismo que le costó a Pemex pérdidas por 24.2 millones de dólares.
Los dos ejecutivos de Pemex que autorizaron la parte problemática del contrato, Lorenzo Aldeco y Manuel Sánchez, lo hicieron sin pedir autorización del departamento legal o de sus gerentes en Pemex, saltándose controles de rutina, según el reporte de la SFP. Aldeco dejó Pemex más tarde y se convirtió en ejecutivo de Unigel, mientras que Sánchez actualmente dirige Pemex Petroquímica.
Así, Reuters menciona varios contratos irregulares localizados en su investigación, en los que las circunstancias comunes son la impunidad, la falta de respuestas y el desfalco a Pemex.