Arquidiócesis de México cuestiona ‘salvamento’ a Pemex
En el seminario Desde la Fe califica al sindicato petrolero de corrupto y opaco
La reforma energética propuesta por el Ejecutivo federal está eclipsada por el daño financiero que se ha hecho a Petróleos Mexicanos, que ha sido botín de todos y lastre para los contribuyentes, criticó este domingo la Arquidiócesis Primada de México.
A través de la editorial del semanario Desde la Fe, su órgano informativo, cuestionó el rescate que deberá hacer el gobierno federal de la paraestatal al buscar fundar una empresa productiva y competitiva de cara a la apertura del sector.
“Así lo reconoce el dictamen sobre la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria de las Comisiones Unidas de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, cuando describe los privilegios que inflaron las deudas de la paraestatal: pensiones ‘más generosas’ que las del IMSS y el ISSSTE, mayores obligaciones devengadas de pasivos laborales, lastres en sus finanzas”, expuso el semanario en su editorial de este domingo.
Y añadió que el hecho de que el gobierno federal asuma este saneamiento como sano, no elude la responsabilidad del sindicato petrolero encabezado por el actual senador por el PRI, Carlos Romero Deschamps.
“Que la Federación asuma parte de este financiamiento como algo sano, no justifica, de forma alguna, la opacidad, la falta de rendición de cuentas y, más grave, la corrupción porque un gremio, nacido de la lucha, abusó de sus derechos hasta comprometer el futuro de los trabajadores. El escándalo es que los contribuyentes barran la basura para justificar la excelencia de la empresa… Y por esa misma ruta camina la Comisión Federal de Electricidad”.
Para la Arquidiócesis de México, las pérdidas en Pemex aparecieron porque en vez de invertir se gastó en otras cosas.
“Los números negativos aparecen cuando, en lugar de invertir, se gastó en prestaciones increíbles o cuando el producto de la riqueza del subsuelo, simplemente, desapareció”, acusó.
La representación de la Iglesia católica en la ciudad de México considera que los pasivos que se tendrán que absorber son consecuencia de diversas irregularidades reportadas en 2012.
“La carga que se pretende absorber es consecuencia, además, de las irregularidades en los sectores de Pemex y reportados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en 2012 como fueron, por ejemplo, pagos improcedentes de contratos, pérdidas millonarias en la producción, arrendamientos sin cobrar, licitaciones directas improcedentes, la suspensión en el desarrollo de Sistemas de Recursos Humanos y de Nómina que implicaron el pago de 444.7 millones de pesos o bien la suspensión de la Sistematización del Proceso de Finanzas sin ‘que se hayan aprovechado los trabajos realizados’ por los cuales se pagaron 176.2 millones de pesos”.
El 2 de agosto, la Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular con 326 votos a favor y 113 en contra el último dictamen que avala el “Pemexproa”, donde convierte el pasivo laboral de Petróleos Mexicanos (Pemex) en deuda pública por 1.1 billones de pesos y el de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por 0.5 billones de pesos.