Alza al refresco no atacaría el problema de obesidad
Padres de familia argumentaron que regular la cantidad de dinero que se da a los hijos y regular la venta de comida “chatarra” al exterior de las escuelas, son la mejor herramienta
Padres de familia en algunas primarias de Querétaro negaron que el impuesto que se pretende fijar a los refrescos vaya a disminuir el consumo de alimento denominado “chatarra” entre los menores, puesto que a decir de ellos solo la cultura y educación de los padres de familia podría combatir de lleno la obesidad infantil.
Así lo manifestaron a Códice Informativo padres de familia de la primaria José María Morelos, en la comunidad de Jofre, de la delegación Santa Rosa Jáuregui; donde señalaron que existen factores externos y un descuido para lo que los niños ingieran este tipo de alimentos.
“Mire, yo he visto que afuera sí les venden de todo, de qué sirve que uno les esté dando sano de comer si a la salida ya están con las frituras, los refrescos, los gansitos, realmente lo que deberíamos de hacer es ya no darles dinero, yo por ejemplo nada más le doy a mis niños cinco pesos, para cualquier cosa, con eso no compran tanta chatarra”, afirmó Leticia Campos, madre de familia.
Otros apuntaron que depende de la educación alimentaria que les den los padres a sus hijos, ya que vieron en el hogar el mejor complemento para combatir la obesidad, pues, señalaron que no se puede vigilar a los hijos las 24 horas del día.
“Yo creo que no va a bajar la obesidad; es que es por la cultura de uno, si en la casa les están dando grasa, refresco, pues en la escuela da lo mismo qué les vendan o no (…) también es importante que hagan ejercicio desde niños, porque luego ya cuando están panzones ya para qué”, manifestó María Moreno, madre de familia quien tiene un hijo en quinto año de primaria en Santa Rosa Jáuregui.
En tanto, personal de la cooperativa de la escuela afirmó que por su parte han hecho lo necesario según requerimientos de la UAEBEQ, pero reconocen que a las afueras de los planteles es cuando los estudiantes ingieren cualquier tipo de alimentos.
“Aquí viene por dulces, jugos, sándwiches, ya refresco ya no vendemos, papas tampoco, casi nomás vienen por algún dulce, un chocolate, o estampitas, también depende del juguete que esté de moda o el personaje. Ya las mamás mejor les dan el lonche y aquí nomás vienen por el jugo”, indicó Francisca Rosales, encargada de la cooperativa de la primaria José María Morelos, en Santa Rosa Jáuregui.
Los padres coincidieron en que el regular la cantidad de dinero que se les da para gastar, así como darles alimentos nutritivos al salir de casa son las mejores herramientas para el combate a la obesidad infantil, y la prevención de enfermedades como diabetes.