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Julio 11, 2018

Por Staff Códice Informativo - 11/07/2018

El triunfo de Andrés Manuel López Obrador sí que traerá cambios. Habrá que esperar si vendrán los cambios prometidos, pero por lo pronto se cocinan […]

 Julio 11, 2018

Foto: Especial

El triunfo de Andrés Manuel López Obrador sí que traerá cambios. Habrá que esperar si vendrán los cambios prometidos, pero por lo pronto se cocinan diferencias sustanciales en la organización política del gobierno federal, y esto en Querétaro podría tener sus consecuencias directas.

Y es que, por una parte, en la reunión que sostuvo Andrés Manuel López Obrador con los candidatos a diputados y senadores de su partido ganadores el pasado 1 de julio, se discutieron diversas modificaciones legales entre las que se incluiría la supresión de las conocidas como delegaciones federales, que son las micro secretarías de Estado federales en las que se operan las políticas públicas de los órganos de ese nivel de gobierno.

Por la otra, se asegura en los pasillos políticos que en la misma reunión el próximo Presidente de la República ungió a quienes serán sus “coordinadores estatales de programas de desarrollo”, que serán quienes suplirían las funciones de las delegaciones federales. Y el de Querétaro es nada más y nada menos que Gilberto Herrera Ruiz.

Todo parece indicar que la función de coordinador estatal de programas de desarrollo podrá trabajarse junto a la función como legislador, por lo que Herrera Ruiz amasaría el ya de por sí considerable poder político que históricamente tienen los Senadores, con el nada despreciable poder que hasta ahora tienen los delegados federales.

Tal parece que con esto se recuperaría la antigua figura de los “jefes políticos”, esos personajes con tal nivel de influencia y poder de decisión que se volvían ejes fundamentales en el organigrama político. Y en Querétaro, ese será Gilberto Herrera.

Ya se sabía que Gilberto Herrera será, muy probablemente, la carta fuerte de Morena para la gubernatura de Querétaro en 2021. Con esto, no queda duda que la apuesta viene desde lo más alto y que el exrector tendrá herramientas como nunca antes para construir ese camino.


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