Abril 14, 2015
Cambio de piel. Tras el incendiario discurso de Roberto Loyola en San Pedro Mártir, al candidato tricolor se le nota más cómodo. Haber dejado la […]
Cambio de piel.
Tras el incendiario discurso de Roberto Loyola en San Pedro Mártir, al candidato tricolor se le nota más cómodo.
Haber dejado la pose de estadista y reconocerse ya como un candidato que pelea una elección completa, le permite enfrentar el proceso con otro semblante. Responde a las críticas panistas y lo hace con sonrisas sarcásticas. Le tomó una semana “entonarse”.
Solitaria.
El ímpetu de Marcos Aguilar contrasta, en gran medida, con el tedio que empiezan a sentir algunos reporteros luego del ajetreado ritmo de la agenda que lleva.
Y es que al principio varios compañeros de los medios de comunicación, empezaban su jornada a las 6:30am acompañando al candidato a su recorrido por las paradas de autobuses a saludar a la gente que se va a trabajar.
Poco a poco los reporteros empezaron a tirar la toalla y en una semana el número de acompañantes se redujo drásticamente.
Hoy solo un fotógrafo despistado de un medio impreso fue el único en dar puntual cobertura a la matutina actividad del panista; habrá que recordarle a Aguilar Vega que “no por mucho madrugar, amanece más temprano”.
La serpiente y la luciérnaga.
En donde han pasado cosas muy extrañas con las agendas de los candidatos es en el municipio de Corregidora.
Fíjese que diariamente el candidato del PAN Mauricio Kuri manda su agenda de actividades al igual que Javier Ortega candidato del PRI a la alcaldía de aquellas tierras; pero al poco rato de que uno la manda, el otro la modifica y la manda “actualizada”.
Esto ha pasado al menos en el mercado de El Pueblito, Los Olvera y Santa Bárbara donde Kuri llega primero y al poco rato Ortega lo alcanza.
Los asesores del panista no saben si se trata de algún tipo de estrategia o de si los estrategas del priista están interpretando mal el dicho que dice: caballo que alcanza gana ¿será?
Víbora opípara.
Otro que anda muy extraviado o de plano no conoce “la calle” es el candidato del PRI a la presidencia municipal de Querétaro, Manuel Pozo.
Narran que durante una gira banquetera se metió a uno de esos negocios de cortinas verdes y blancas famosos por vender licuados y productos para la nutrición.
El candidato priista no sabía lo que era pero por la facha imaginó que se trataba de una peluquería, por lo que tras correr la cortina pidió que le hicieran un corte de pelo, a lo que las dependientas entre sorprendidas y molestas le contestaron que ahí no era estética sino un negocio de nutrición, así que al susodicho no le quedo de otra que apechugar, pedir y tomarse un nutritivo licuado.