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¿Presidenta Clinton o Presidente Trump?

Por Eduardo Magaña - 02/11/2016

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

El 20 de enero de 2017 tomará posesión uno de los dos, y para el miércoles 8 de noviembre lo sabremos

 ¿Presidenta Clinton o Presidente Trump?

La elección más controvertida y competida en nuestro vecino del norte se resuelve el martes 8 de noviembre. Esta es una elección clave para el futuro de la relación con nuestros vecinos del norte. Es por eso, que en este pequeño espacio, trato de recuperar los puntos más importantes de la relación México – Estados Unidos, compleja como es, así como las características positivas – aunque pocas – tanto de la candidata presidencial del Partido Demócrata, Hillary Diane Rodham Clinton, como del candidato presidencial del Partido Republicano, Donald John Trump.

Uno de los dos será Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, sí o sí. La carrera por la presidencia del país más poderoso y rico del mundo, es un virtual empate entre los dos candidatos. Vayamos desde el principio para entender un poco de nuestra ajetreada historia conjunta.

Después de la independencia de México en 1810, México y los Estados Unidos han tenido numerosas disputas territoriales y problemas migratorios. La migración es la raíz de la primera disputa entre los Estados Unidos y México. En 1830, México prohibió la inmigración a Texas desde Estados Unidos en un esfuerzo por detener la afluencia de colonos de habla inglesa – ¡cómo han cambiado los tiempos!

Terminada la Revolución Mexicana, la oportunidad económica al otro lado de la frontera ha sido el principal estímulo de la migración de nuestra gente a los Estados Unidos. El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, NAFTA en inglés) – un acuerdo regional entre los gobiernos de Canadá, de los Estados Unidos y de México para crear una zona de libre comercio, firmado el 10 de junio de 1990 -, abrió el camino hacia una relación más estrecha entre Estados Unidos y México en materia de seguridad, comercio y lucha contra el narcotráfico, entre muchos otros temas.

Estados Unidos y México han disfrutado de una relación única y privilegiada, aunque con obvios altibajos, en las últimas décadas. Norteamérica es una de las regiones más prósperas y competitivas del mundo. Tenemos una relación económica intensa que se extiende sobre una miríada de áreas. México es el tercer mayor socio comercial de los Estados Unidos, después de China y Canadá. El comercio bilateral total entre nuestros países ascendió a más de 500 mil millones de dólares durante 2015 según el CFR (Council on Foreign Relations).

Nuestras exportaciones a los Estados Unidos han aumentado considerablemente desde que entró en vigor el TLCAN. México compra más bienes estadounidenses que todos los BRICS combinados – y casi tanto como toda la Unión Europea. Cada minuto, casi un millón de dólares en productos cruzan nuestra frontera terrestre.

Según números oficiales, más de 34 millones de personas de origen mexicano viven en los Estados Unidos, casi 23 millones de los cuales nacieron aquí. Cerca de 6 millones de empleos en los Estados Unidos dependen del comercio con México. Según la Presidencia de la República, para el año 2020, México tendrá la capacidad de construir uno de cada cuatro vehículos en América del Norte.

Ambos países, indudablemente estamos intrínsecamente interrelacionados. Ahora bien, ¿quién nos conviene, Hillary o Trump? No sé. Los dos tienen bemoles pero tienen fortalezas. Hillary tiene una trayectoria política de más de 30 años en la vida pública y ha tenido una relación próspera y probada con México. Trump llegaría con el rechazo de la comunidad internacional, especialmente por su maltrato a las minorías – entre ellas sus insultos contra los mexicanos en Estados Unidos. Trump llega sin compromisos – lo dejaron sólo, y esto puede representar una gran oportunidad para ‘volver a empezar’.

Estados Unidos y México han trabajado juntos para profundizar lazos y lograr una agenda que refleje nuestras fortalezas y valores comunes. Juntos, gane quien gane, espero que podamos construir una América del Norte más integrada, competitiva y próspera. El 9 de noviembre sabremos el resultado. Que todo sea para bien.

Eduardo Magaña

Especialista y consultor en asuntos internacionales, Presidente de la Cámara de Negocios Kazajstán-México y Delegado de KFA en el país. Con experiencia de vida en 21 países de América, Europa, África, Asia y Oceanía, lugares en que ha mantenido los más altos contactos. Ha sido también colaborador de publicaciones en Forbes, NYT y Foreign Affairs.


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