Nace la “Fundación J.L. Aguilera Ortiz”, con claro compromiso social…pero también político

Con registro y conforme a la ley en la materia, toma forma en Querétaro la “Fundación José Luis Aguilera Ortiz, A.C.” y la que, desde el pasado mes de mayo, está ya funcionando y cumpliendo con sus metas de asistencia social, médica, de seguridad y del deporte, entre otras de las muchas acciones que ya está prodigando.

La nueva fundación tiene como presidente a Luis Mario Aguilera Rico, uno de los hijos del Lic. José Luis Aguilera Ortiz, recientemente fallecido.

“Vamos a retomar, con respeto y mucho entusiasmo, la tarea que ya realizaba mi padre, particularmente en ayuda, pláticas por expertos en la materia, a las personas que están integradas a los grupos de Alcohólicos Anónimos, pero también a quiénes requieren de algún trasplante o bien, de apoyo en todos los deportes”, nos dijo el joven Luis Mario, mejor conocido como Bam Bam.

Dice que de lo que se trata es ayudar a la gente de todos los niveles sociales, pero particularmente a los que viven en las zonas marginadas y más desprotegidas de la capital queretana, en colonias populares como San Pedrito Peñuelas, Sendero, Satélite o la delegación municipal Felipe Carrillo Puerto, sus comunidades rurales que abarca, barrios y colonias.

La Fundación José Luis Aguilera Ortiz, tiene su domicilio social en la calle Costureras número 11, de la colonia de San Pedrito Peñuelas.

De hecho, en toda esta zona ya abundan las bardas pintadas, utilizando los colores rosa y azul marino, en las que se señala que esta fundación ya trabaja “por la familia, por la salud, por la seguridad y por el deporte”.

Así es como ya se tienen más de cien bardas pintadas, sin promocionar necesariamente a precandidato alguno.

Si bien esta fundación la preside Luis Mario, en el cumplimiento de las metas trazadas está integrada toda la familia. Ahí están la señora Lucía Rico, viuda de Aguilera y todos sus hijos, su hija, Ada Iris Aguilera Rico, el propio regidor José Luis Aguilera Rico. Toda la familia, pues, integrada a esta Fundación.

“Además de los citados colores rosa y azul marino, también tenemos bardas pintadas con los colores guindas y amarillos, porque de hecho tenemos amigos en todos los partidos políticos. Esta fundación – y tengo que decirlo – es una respuesta, con acciones firmes, palpables, para toda esta gente a la que entregó su vida mi señor padre, pero también como una respuesta al maltrato que, a su muerte, recibió de parte de instancias oficiales y a las que servía al momento de morir. Nadie, de este gobierno, se paró en su sepelio. Vamos, ni siquiera una esquela recibimos la familia. Y eso duele”, me dice el Lic. José Luis Aguilera Rico.

Al momento de su desaparición física – no moral, porque la herencia sigue – Aguilera Ortiz tenía en formación un partido político y que buscaba el registro local para contender.

“Quiero decirte que mi activismo político no se detiene. Mi papá jamás me enseñó a hacerme concha y mucho menos a recibir migajas. En esta Fundación, comenzamos ya con hechos y no palabras y llevamos pasos firmes” dijo el regidor, hasta ahora – y todavía – por el Partido Acción Nacional.

Me confió que “mi rumbo político que tomaré para este proceso electoral del 2024, aún no lo tengo decidido, pero no me estaré con los brazos cruzados. Estamos analizando alguna de varias invitaciones que de diferentes partidos hemos recibido, pero pronto tomaré mi decisión política. Una cosa si le digo don Andrés, no tengo ninguna razón para quedarme en el PAN y si, muchos agravios”.

Esta Fundación tiene como fin primordial impulsar, apoyar y realizar acciones de beneficio social, pero igualmente una muy clara intención de hacer política con marcados tintes de justicia social.

Ni que.