C.C.P Delfina Gómez Álvarez, candidata al gobierno del Estado de México

No hay elementos que demuestren que quien gana la elección del Estado de México refrendará el triunfo en “la grande”. Sin embargo siempre reviste una gran importancia nacional por diversas coyunturas políticas y este año no es la excepción, por lo que los candidatos locales no son los únicos hablando y operando.

Los videos que exhiben a la candidata de MORENA a la alcaldía de Las Choapas en Veracruz, Eva Cadena, recibiendo dinero para su campaña e involucrando verbalmente a Andrés Manuel López Obrador, tienen como objetivo desgastar y generalizar la percepción de que la corrupción puede estar en todos los partidos, pero no para que Eva no gane Los Choapas, sino para mermar de rebote las probabilidades de que usted se alce con el triunfo en el Estado de México, mientras debilita de paso a su líder nacional y la marca.

López Obrador es seguramente uno de los políticos mas desprendidos de lo material que se ha conocido en México y a estas alturas está claro que enriquecerse a través de la política no está entre sus objetivos, que las banalidades que a tantos los hace aspirar a distintos cargos públicos, no son el motor que mueve al Presidente de MORENA, pero esto no quiere decir que esas tentaciones no sean las que en efecto incentiven a algunos de los viejos y nuevos correligionarios de AMLO.

Andrés Manuel lleva años manejando la imagen de una persona honesta y prometiendo que su llegada a la Presidencia marcará el fin de la corrupción. Si bien el video donde aparece Eva Cadena no puede considerarse como una prueba de que López Obrador fue el destinatario de ese dinero, lo que es cierto es que podría evidenciar que en la práctica, más allá del discurso, será difícil para él controlar que todos aquellos que ha recibido y hasta perdonado, sean en efecto honestos y en algunos casos no vuelvan a las andadas, corriendo el riesgo de debilitar uno de sus pilares discursivos.

Usted se ha convertido de manera directa también en un blanco importante para desgastar a MORENA y al propio Andrés Manuel, quien la impulsó como candidata. Hoy se le acusa de haber descontado un porcentaje del salario de trabajadores del Municipio de Texcoco en su etapa como alcaldesa, que irían presumiblemente a una asociación de quien argumentan los panistas es su padrino político y actual alcalde de Texcoco Higinio Martínez.

Su ventaja competitiva como candidata a gobernadora se basa en buena medida en participar por un partido que no tienen mala reputación en relación temas de corrupción, lo cual es fácil de explicar, ya que hoy no gobierna ningún Estado del país, dejándoles ese desgaste a quince priistas, once panistas, cuatro perredistas, un verde y un independiente. Sus adversarios buscarán poner a MORENA en el mismo nivel.

La elección del Estado de México no es el laboratorio presidencial, pero sí puede ser un referente que, dependiendo de su capacidad para dar vuelta a la página sobre estas denuncias que pesan sobre usted, alcance a mover la opinión pública hacia un pensamiento de total desesperanza, de que aún un político honesto no tiene capacidad de controlar la corrupción de sus subalternos, perdiendo argumentos hacia el 2018.