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AMLO prueba ser corrupto

Por Héctor Parra - 31/08/2022

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

¡Vamos a limpiar al Poder Judicial! La mayor parte del personal no resiste las tentaciones. Así ofende, difama y calumnia el presidente López Obrador, al […]

 AMLO prueba ser corrupto

Foto: Archivo

¡Vamos a limpiar al Poder Judicial! La mayor parte del personal no resiste las tentaciones. Así ofende, difama y calumnia el presidente López Obrador, al personal del Poder Judicial.

Una vez más (lo han hecho antes) integrantes del Poder Judicial responden de manera inmediata al Titular del Poder Ejecutivo, al calificarlos de corruptos. Los impartidores de justicia en un comunicado dijeron que, lo afirmado por López Obrador es un acto que atenta en contra de la independencia del Poder Judicial.

AMLO no gusta de sujetarse al Estado de Derecho, desde campaña mandó “al diablo a las instituciones”; ya como presidente descalifica las resoluciones judiciales y cuando no avalan sus abusos ha referido: “no me salgan con que la ley es la ley”; en franca rebeldía con las sentencias de jueces, magistrados y ministros de la SCJN.

El irresponsable de López Obrador, atenta en contra del equilibrio de Poderes; AMLO pretende ser la “santa trinidad” y asumir las 3 funciones públicas: legislar, decidir la justicia y administrar al Poder Ejecutivo.

No soporta el orden jurídico, con ello pone en riesgo la democracia y nos lleva a un Estado despótico, literalmente a una dictadura.

Ayer mismo, en respuesta a la ofensa que lanzó en la “mañanera” en contra de los impartidores de justicia, estos, en un comunicado de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito, sostuvieron que: “la división de poderes es una demanda de equilibrio plasmada en la Constitución”. Algo que por supuesto repudia el presidente López.

Los integrantes de la Asociación expresaron, entre otras cosas lo siguiente: “Consideramos que hacer inferencias respecto de una corrupción generalizada entre las y los juzgadores es un acto que atenta contra la independencia judicial”. Además, le hacen ver el autoritario de AMLO que tienen un código de ética interno, controles institucionales y disciplinarios. Contrario a lo que no tiene Andrés López Obrador, éste carece de ética y ha destruido los controles institucionales y disciplinarios.

Le hicieron ver al tirano y autócrata de López Obrador que: “Las personas juzgadoras nos debemos a la sociedad, constituimos aproximadamente 1600 titulares, en su gran mayoría producto de la educación pública; nuestros honorables encargos los obtenemos por concurso de oposición; nos caracteriza la honestidad, imparcialidad y objetividad en nuestra función, sin hacer caso a intereses obscuros o de grupo alguno”. Obvio, lo contrario a López y sus huestes.

Por parte de los ministros, a pesar de que la ofensa también les llega a los aparejos, guardaron silencio. Arturo Zaldivar Lelo Delarrea, presidente de la SCJN, no es capaz de contradecir a su “superior jerárquico”, lo cual es una ominosa pena. Acepta las ofensas que, un día sí y el otro también les lanza el titular del Poder Ejecutivo, quien no es más que un mandante al servicio del pueblo, es homólogo del presidente de la Corte, titular de otro Poder, no es subordinado ni empleado del Presidente de la República, aunque se comporta como su bufón y lacayo.

Lo que no quiere ni acepta AMLO, que le arrebaten el uso faccioso y arbitrario del uso discrecional de la prisión preventiva oficiosa; conste, él no es ni ministerio público ni fiscal, pero sí el jefe de Alejandro Gertz Manero, quien no se ha expresado al respecto. La FGR dejó de ser autónoma para convertirse en el apéndice del presidente López.

En atención a las atribuciones del presidente, no debiera intervenir en el tema. Él no tiene competencia legal ni moral alguna. Por sus furibundas palabras demuestra que él decide quién se queda o quién no se queda en la cárcel, aplicando oficiosamente la prisión preventiva. Ese es el meollo del asunto: demuestra el abuso del poder que ostenta.

Si los ministros deciden eliminar la discrecionalidad, AMLO ya no podrá decidir por medio de presiones o amenazas; o los manda investigar; así de gansteril es el actuar del presidente de la República. Él confirma el supuesto al molestarse y ofender a los impartidores de justicia federal.

El pleno de la SCJN tiene la obligación de eliminar, coartar los abusos que se han cometido con la figura jurídica que en principio creyeron sería benéfica en el ámbito de la impartición de justicia penal; en la práctica se convirtió en abominable herramienta política para encarcelar “de oficio” a los enemigos de la 4T. Así de simple. Las evidencias de Andrés López Obrador están a la vista.

Como a López Obrador gusta de “litigar públicamente” todos los asuntos, alegó lo siguiente para justificar su abusiva postura: “Pedimos al máximo tribunal del país que, al momento de resolver los asuntos mencionados, considere la seguridad pública del país, a las víctimas de los delitos, el combate a la impunidad y el enorme esfuerzo que implica la persecución criminal donde participan fuerzas federales y estatales, así como las fiscalías locales y la Fiscalía General de la República, y que, en consecuencia, prevalezca la prisión preventiva oficiosa, tal como lo establece nuestra ley fundamental” ¡Apoyo total a sus arbitrariedades!

El neófito en Derecho, también alegó: “Es fundamental la existencia de la prisión preventiva oficiosa en ciertos delitos (ya está en la Constitución), para asegurar que los presuntos criminales a quienes se les detiene por delincuencia organizada, delitos graves del orden común o delitos de cuello blanco, no se sustraigan de la acción de la justicia durante el proceso penal, tomando en consideración que, en muchas ocasiones, detenerlos implica un gran esfuerzo del Estado en recursos, inteligencia y despliegue de fuerzas. Se trata de evitar, de igual manera, que evadan la acción de la justicia”.

Qué imaginación de quien no acostumbra respetar el Estado de Derecho y mandar al diablo a las instituciones. El cinismo también es característica de Andrés López Obrador.

Bien por la respuesta de los integrantes de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito.

Veremos de que están hechos los ministros cuando resuelvan el trascendente tema de la prisión preventiva oficiosa, por la que clama en favor el abusivo de AMLO.

Héctor Parra


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