Paros, paros y más paros

Una de las lecciones más duras para la economía se dio en 2021, con la crisis en las cadenas de suministros, que a la postre disparó el aumento del nearshoring, como una forma de contrarrestar las afectaciones a la producción.

La escasez de transportistas, tanto por paro de actividades, como por falta de perfiles capacitados, provocó que miles de contenedores quedaran varados en los principales puertos de los Estados Unidos, e incluso de México, mostrando así lo frágil que puede ser el sistema sobre el que está montado el capitalismo moderno.

En los últimos días, una serie de paros han encendido las alarmas en las cadenas de suministro, sobre todo por las implicaciones económicas que tiene para México; el primer caso es la huelga de trabajadores automotrices en Estados Unidos, la cual afecta a las armadoras de GM, Ford y Stellantis.

De extenderse el paro por un periodo prolongado de tiempo, las afectaciones al sector de autoparteras mexicanas que proveen el mercado estadounidense podrían ser serias, sobre todo, si se tiene en cuenta que el sector automotriz viene saliendo de una crisis por falta de semiconductores, que durante 2021 y 2022 retrasó la producción de vehículos.

Mientras esto pasa en territorio norteamericano, en México la empresa Ferromex llevó a cabo un paro, el martes 19 de septiembre, de 60 trenes por una presencia masiva de migrantes en la zona sur del país, quienes utilizan este transporte de carga como una forma de movilizarse por territorio mexicano y alcanzar así la frontera con EUA.

Este paro tendrá un efecto directo sobre el sector exportador e importador, que utiliza este medio para el transporte de mercancías, lo que significaría pérdidas millonarias, así como también desabasto. Por su parte, el presidente López Obrador restó importancia al hecho y señaló que lo importante en este momento son los migrantes.

Por si esto fuera poco, este miércoles 20 de septiembre, transportistas de Chihuahua han puesto sobre la mesa la posibilidad de un paro de actividades mientras el tema migratorio no sea resuelto, esto en el marco del de la Convención Nacional de Canacar 2023, que se lleva a cabo en Playa del Carmen.

De ser así, el transporte de mercancías en México estaría enfrentando uno de los escenarios más complicados en los últimos años, y la escasez de mercancías se convertiría en un foco rojo para el descontento social, sobre todo si se toman como referencia las compras de pánico tanto de combustible como de productos para el hogar, que se han suscitado en este sexenio.

Un paro en la economía mexicana también pondría en riesgo otros aspectos que han favorecido al país en los últimos meses, como la llegada de empresas por cuestiones de relocalización, o la fortaleza del peso, que ha tenido uno de los mejores desempeños de la historia.

La duda, en el aire, es si esta serie de paros no sería una forma de presión política hacia AMLO, sobre todo, luego de los desencuentros que en el pasado tuvo con Grupo México, dueña de Ferromex, por la ocupación “temporal” de un tramo de vías férreas.