Gigante con pies de sal, a punto de caer

Con los registros en el PRI para las posiciones federales, particularmente para el senado, con sus pronunciamientos y asegunes, se aceleraron en ese partido – y desde ese mismo día – las operaciones políticas locales, las de enmienda y que ayer inundaron las redes sociales, con lo que se recrudecieron los golpes bajos pero en la que, ahora sí, se afina la puntería sin llevar necesariamente balas de salva.

Esto anticipa la caída de un gigante de la política local que, con pies de sal – el que aún “no termina de entender que ya terminó” – porque la marea nacional también incluye a Querétaro en donde, al igual que en al menos otras ocho entidades, vienen con una inminente enmienda de plana.

Para el caso de Querétaro, el equívoco accionar de un Comité local errático, sin oficio político y absurdamente excluyente, podría venir la posible atracción de toda la contienda o lo que resta de esta, tal y como ya lo tomó el CEN en la CDMX.

Tras el registro, se vino a levantar ámpula si bien por las definiciones políticas de uno de los aspirantes al Senado, también el atajar por dos de los aspirantes, en forma abierta y decidida, el adelanto que para la jugada local tenía uno de los aspirantes a este puesto y que, con esto y de manera casi segura, termina por caerse y quedar en el empeño.

Todo esto hasta anoche en donde ya quedó cuajado el queso político local.

En horas previas al registro, tambien se hubo de operar una jugada política de fino accionar y delicada trascendencia. Se atajó, desde las más altas esferas nacionales, el registro de una de las propuestas femeninas para alcanzar el senado por Querétaro. Se trató de la Lic. Paulina Escobedo, directora de Desarrollo Territorial y Organización Rural de la SAGARPA y por ende carta política de Pepe Calzada para tener presencia en el Senado de la República.

Y no llegó.

Con esto, se dejó sola en la jugada a la única mujer que logró hacer efectivo su registro. Y sigue en pie.

Pero las redes sociales de ayer fueron el reflejo de lo que, la tarde del sábado y todo el día del domingo, se estuvo operando.

Las tronantes declaraciones de Jesús Rodríguez entorno al tibio accionar del CEN para el caso de Querétaro, aceleraron el pulso de la contienda, por lo que sus declaraciones lo menos que lograron fue subir a Braulio y a Hugo a la exigencia generalizada de la militancia para demandar aquí, no a la opinión pública como ellos quisieron disimular su enojo, sino a la dirigencia nacional, “transparencia y pulcritud de los procesos internos”, particularmente los de su partido.

Y hablaron, en un escrito firmado por ambos, de que los principios de este partido, el PRI, “son traicionados por aquellos que consideran que las prácticas anacrónicas y antidemocráticas tienen cabida en el siglo XXI”. La palabra traición fue justamente la misma que utilizara Rodríguez al patentar los posibles resultados que pudieran tenerse en Querétaro en este proceso que, incierto y más adverso que nunca, sigue corriéndose en este partido.

A la par, se da la reaparición de la carta que, llevada hasta el CEN del PRI, con fecha de recibido de apenas el pasado jueves, se vuelve a insistir en “la intervención urgente” de esa instancia en nuestro estado, con el requerimiento de un Delegado del CEN, “imparcial en la toma de decisiones, porque necesitamos un cambio urgente de timón en la dirigencia del Partido” y lo ponen como elemento indispensable para la entrega de buenas cuentas en las votaciones en favor de J.A. Meade Kuribreña. La solicitud viene firma por más de cincuenta priistas queretanos.

A todo esto, tanto los días de cierre de registro para las posiciones federales como este mismo inicio de semana, ni el delegado en supuestas funciones ni el presidente del CDE, han hecho su aparición, tratando con ello de esquivar reclamos y eludiendo abiertamente sus responsabilidades.

Y abandonaron ya el barco, cuando el proceso local comienza a hacer agua.

Con esto pero más por la falta de aseo político de un proceso que camina incierto en sus resultados, incluyendo los que aquí pudiera tener Meade, un periodo de dominio político de un marcado grupo local y encabezado por quién todavía es titular de SAGARPA, podría estar cercano a su fin.

El falso gigante con pies de sal comienza a ceder ante la marea de un partido que tiene un proyecto nacional que salvar.