Pumas pierde invicto en CU

Los Pumas perdieron su invicto en casa frente a Tigres, al caer 3-1, y comienza a complicar su pase a la Liguilla, al ubicarse en el noveno lugar de la tabla con 20 unidades.

En un estadio, en su mayoría pintado de rosa por la campaña organizada por los de casa contra el Cáncer de Mama, Pumas y Tigres iniciaron un prometedor compromiso en busca del arco contrario, sobre todo los auriazules necesitados de puntos al estar fuera de zona de liguilla antes del inicio de este juego.

Sin embargo, el equipo norteño generó las primeras ocasiones de peligro del cotejo para exigir al arquero Alejandro Palacios, quien atajó a Lucas Zelarayán y a Andy Derlot.

Paco Palencia y su equipo tuvieron un pésimo comienzo en uno de los partidos más importantes del cuadro universitario, y apenas al minuto siete, Lucas Zelarayán abrió el marcador a favor de los felinos del norte, al cobrar un tiro libre, imposible para el Pikolín.

Y al 20′, la situación se complicó aún más, pues Marcelo Alatorre se fue expulsado, después de que viera la segunda tarjeta amarilla del encuentro, luego de una barrida sobre Jorge Torres Nilo.

El domino visitante continuó e Ismael Sosa, ex de Pumas que se llevó los aplausos de la afición antes del comienzo del choque, estuvo cerca de anotar pero el portero de los Pumas lo evitó con su achique a tiempo.

Sin embargo, un minuto después de la media hora de juego, los Pumas lograron  anotar el tanto de la igualada parcial, después de que el uruguayo Matías Britos, con un tiro cruzado que pegó en el poste, para acabar su remate al fondo de las redes.

Tras el descanso, la imprecisión apareció en los dos clubes y la lógica imperó, un Pumas acomodando atrás y en busca del contragolpe y un Tigres con la posesión del balón pero sin asfixiar al oponente, al estilo de Ricardo Ferretti, sin presionar del todo pese a la superioridad numérica.

Con todo y que Tigres no se exigió para aprovechar la ventaja numérica logró el segundo al 57′ por medio de Andy Delort, quien supo aprovechar un error de la zaga para fusilar a Pikolín, para estrenarse en la Liga MX, justo cuando ocupó el lugar de su compatriota André-Pierre Gignac que por lesión ni siquiera hizo el viaje a la capital.

Los locales sacaron la garra al final del juego pero no fue suficiente, el hombre de menos pesó, más con la postura defensiva que adoptó Tigres para entonces y todavía así le alcanzó para el tercer tanto, obra de Sosa ya en tiempo de compensación.

La anotación de Tigres cayó justo cuando los auriazules dejaron escapar una clara ocasión de contragolpe, por lo que la regla se cumplió: después del error vino el acierto y gol del rival. Dicho esto para aumentar las dificultades al local.

Para poner el último clavo en el ataúd, Ismael Sosa sentenció la victoria para los dirigidos por el Tuca Ferretti. El ex puma no celebró su gol en CU.