Quinta Schmoll, una vida entre cactáceas

Distintas variedades de biznagas, sábilas africanas y cactáceas mexicanas, además de diferentes especies de nogales y magueyes son albergadas en el Vivero Quinta Fernando Schmoll, ubicado en Cadereyta de Montes, y reconocido como uno de los invernaderos más importantes de cáctaceas y  suculentas de América.

El nombre de este invernadero se atribuye a sus creadores: el pintor Fernando Schmoll y la bióloga Carolina Wagner, quienes construyeron este espacio con la finalidad de estudiar y reproducir las plantas de la zona.

Algunas de las especias que alberga este invernadero son los “viejitos”, una especie perteneciente a la familia de las cactáceas, y cuya flor es reconocida porque tarda aproximadamente 300 años en germinar, lo que le permite alcanzar una vida en promedio de hasta 500 años.

En la actualidad, el invernadero es atendido por la cuarta generación de la familia Wagner y se mantiene en una constante comunicación con institutos de todo el mundo y con especialistas e investigadores, quienes se han dedicado a estudiar algunas de las especies criadas en este espacio.

Este es el caso, de las biznagas,  conocidas por ser utilizadas en la medicina tradicional mexicana y por formar parte de recetas de cocina regional, sin embargo, actualmente esta especie es amenazada debido a su tráfico ilegal y su explotación, que aunado a sus lentos ciclos de vida complican su reproducción, es por ello, que forma parte de las especies protegidas  a nivel nacional.

El vivero Quinta Fernando Schmoll, también cuenta con especies internacionales al recibir semillas de otras partes del mundo para reproducirlas en las condiciones climáticas de Cadereyta, cuya situación geográfica permite la proliferación de especies únicas de flora.