Declaran culpable a asesino de Athos y Tango

Vicente Benjamín “N” fue declarado culpable del asesinato por envenenamiento de Athos y Tango, así como de Balam, un perrito sobreviviente, todos canes pertenecientes al cuerpo de rescate de la Cruz Roja Mexicana. Mañana se realizará la audiencia para dictarle una sentencia que podría ir de los 10 a los 18 años de prisión.

En ese sentido, Edgar Martínez, el entrenador de los perritos, se dijo “tranquilo” por el resultado del juicio en cuyas audiencias se le vio visiblemente afectado y en el que tuvo que recrear lo sucedido en varias ocasiones. Su forma de honrar a sus canes fallecidos, consideró, es entrenando a más como ellos.

“Estamos enfocados en seguir trabajando. Tenemos más perritos especializados y estamos aquí para apoyar a nuestros perros que ya fallecieron pero nuestra meta va a seguir preparando más perritos para que sigan ayudando a más personas”, señaló.

Por su parte, Mónica Huerta, abogada de Martínez, confió en que Benjamín “N” no se dé a la fuga, dado que sigue su proceso en libertad, ya que, hasta el momento, ha cumplido con las medidas cautelares y ha asistido a todas las audiencias del juicio. También, celebró que las pruebas hayan tenido la contundencia necesaria para generar este fallo de culpabilidad.

“Todos los elementos probatorios que se llevaron a juicio fueron contundentes para emitir un fallo condenatorio. El señor tiene algunos recursos, puede apelar y acudir a un amparo directo. Es procesalmente el primer juicio de maltrato contra los animales que hay en Querétaro. Ha estado cumpliendo con sus medidas cautelares, acordémonos que fue conducido con una orden de aprehensión, pero esperemos siga cumpliendo con sus medidas cautelares”, puntualizó.

Cabe recordar que estos canes fueron asesinados en El Marqués después de comer salchichas envenenadas. En las pruebas presentadas estuvieron unos videos de seguridad de una casa en la que, según reconocieron los vecinos, se veía acercarse a Benjamín “N” a una jardinera y lanzar objetos.

Posteriormente, se acreditó que fue él quien las lanzó debido a que sus vecinos de 25 años le reconocieron en las cámaras y, además, se analizaron las salchichas y resultaron con el mismo químico con el que se intoxicaron los caninos.

Aunado a esto, en las audiencias otros vecinos refirieron haber escuchado de su boca la intención de asesinar a los canes, dado que le molestaba que fueran entrenados en el área común del condominio.

Sobre ello, la jueza encargada del caso destacó que, debido a la naturaleza del químico y los daños internos que causó, como heridas de gravedad y hemorragias internas, está acreditado que el hombre actuó con dolo y con la intención de hacer sufrir, de forma cruel, a los tres animales.