Crecimiento territorial de Querétaro ha sido desproporcionado, reconoce Romy Rojas

El territorio habitado en Querétaro ha crecido de manera desproporcionada comparado con el aumento poblacional: en los últimos 40 años el territorio ocupado ha aumentado 36 su tamaño, mientras que, en el mismo periodo, la población sólo ha aumentado tres veces, informó la titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas (Sduop), Romy Rojas Garrido. Esta situación provocó la segregación de la mayoría de la población de escasos recursos.

Durante la clausura de los Foros Ciudadanos para la modificación del Código Urbano del Estado, la funcionaria estatal comentó que la expansión demográfica y el desorden ocasionaron que la infraestructura fuera rebasada.

“La asfixia que tenemos en la Zona Metropolitana no viene de cinco o 10 años para acá, es algo que venimos arrastrando por la falta de visión y falta de empoderamiento al desarrollo urbano”, dijo Rojas, quien también consideró que el desarrollo urbano ha sido subestimado en el país.

Durante su participación en el último foro, Cecilia Martínez Leal, presidenta del Consejo Asesor del World Resources Institute México, explicó que, con el modelo de Ciudad Moderna, las ciudades dejaron de diseñarse en manzanas y calles que forman una cuadrícula, lo que ha provocado el desorden de las mismas.

Este desorden, dijo, trajo como consecuencia la alta demanda de movilidad, pérdidas económicas de escala, pérdida de la escala humana, expansión exponencial de las ciudades en relación con el crecimiento poblacional, lo que provoca el encarecimiento de los servicios básicos.

La secretaria de desarrollo urbano del estado coincidió con Martínez Leal en cuanto al crecimiento exponencial del territorio, y agregó que las grandes avenidas y anillos periféricos fueron la base de dicho fenómeno, lo que trajo consigo ciudades fragmentadas, con personas optando por alejarse de los centros urbanos, ubicándose en zonas carentes de servicios, infraestructura y, en la gran mayoría de los casos, sin certeza jurídica.

Esta situación generó una serie de problemas como el aumento de los índices de contaminación ambiental y propició la dispersión humana, de manera que, poco a poco, las vías existentes comenzaron a ser insuficientes.

“Así, se propiciaron ciudades con grandes vacíos urbanos que contribuyeron a la especulación en el valor del suelo, donde no hay mayor negocio que la especulación del suelo. La ausencia de la buena planeación y que se hubiesen permitido puntos de negociación sujetos a falsas interpretaciones de la ley, privilegiaron de manera abusiva a minorías que lucraban con copiar el modelo American Dream y, con esto, segregaron a la mayoría de la población en una gran vulnerabilidad social”, aseveró Rojas Garrido.

Respecto a la especulación del suelo, puso como ejemplo que en un ejido donde no existen vialidades, se puede encontrar el precio por metro cuadrado en 30 o 40 pesos, pero si se invierte en vialidades y equipamiento urbano, el costo aumenta hasta mil 500, 2 mil o 3 mil pesos.

Modelo urbano del Siglo 21

Cecilia Martínez Leal explicó que las ciudades deben trabajar en aplicar el modelo urbano del Siglo 21, que debe tener buena cantidad y calidad de espacios públicos: 30 por ciento de calles y 20 por ciento de espacios abiertos; además, la densidad adecuada es de 12.5 habitantes por metro cuadrado.

Los gobiernos que planeen las ciudades, deben mejorar la mezcla de usos urbanos; es decir, evitar autopistas y grandes vialidades. También es necesario mejorar la movilidad al hacer énfasis en el uso del transporte público y distancias caminables.

Deben, también, planear para reducir la contaminación y gases de efecto invernadero. Todo esto, puntualizó, debe quedar plasmado en la legislación, la normatividad y los reglamentos previamente elaborados con gobernanza y participación democrática.