Arrancan actividades en Laboratorio del Cuerpo de la UAQ

La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), a través de la Secretaría de Extensión Universitaria, llevó a cabo la presentación de “Diáspora y Vida”, en la que se tuvo un conversatorio con el reconocido bailarín Orlando Scheker, así como la exposición de “Viaje del Alma VII: Ruaj”, de la compañía de danza universitaria contemporánea, y “Ecos de mis huéspedes”, de proyecto FORTEM.

El evento es parte de las actividades del Laboratorio del Cuerpo de la UAQ, dirigido por John Cordero, mismo que se apoya de la compañía universitaria de danza contemporánea, a cargo de Teresa I. Ruiz Martínez; y forma parte de las actividades que la Secretaría de Extensión Universitaria realizará cada sábado de quincena en el Centro Cultural Hangar.

En este marco, la titular de la Secretaría de Extensión Universitaria, Teresa García Besné, afirmó que el interés del área que encabeza es generar un programa en el que estén presentes todas las manifestaciones del arte, principalmente el contemporáneo.

“Este es un espacio de experimentación, es un laboratorio de creación en todas sus disciplinas. Para nosotros contar con un Laboratorio del Cuerpo, y con la primera compañía de danza contemporánea de la Universidad, es un gusto y más de la mano de dos maestros de la calidad de la que tenemos. Quiero agradecerles que podamos hacer de este proyecto que hoy inicia, que es nuestra primicia, una compañía de primer nivel”, manifestó.

En tanto, John Cordero y Teresa I. Ruiz Martínez agradecieron a las autoridades educativas por abrir las puertas del Centro Cultural Hangar para difundir todo lo relacionado con las exploraciones del cuerpo, pues señalaron que los artistas no siempre tienen la oportunidad de mostrar su trabajo.

“El objetivo es invitar a diferentes personalidades de la danza del estado para que compartan un poco de cómo ha sido su labor en este encuentro con la comunidad queretana y cómo han dejado muchos de ellos un legado a la cultura de Querétaro”, aseguró John Cordero.

Como parte del conversatorio, Orlando Scheker explicó que la danza es una forma de expresar una inquietud, es decir, “la manera en la que los cuerpos hablan”.

“Nos están diciendo cosas que intuitivamente percibimos en la psique y nos causan alegría, sensualidad, tristeza, pasión. La danza nos detona emociones en el cuerpo, eso es lo maravilloso de la danza. Por eso la danza no ha muerto y va a seguir viva, porque el hombre no puede prescindir de esos sentimientos que nos provoca mover el cuerpo”, expresó.