Mano a mano con Anna Fusoni
Encuentro exclusivo con una de las figuras más preponderantes de la moda en México, en la Anáhuac Querétaro
Por: Paulina Guerra Melo
Anna Fusoni es considerada una de las figuras más prestigiadas de la moda en nuestro país, por ser una excelente crítica y promotora nuevos talentos del diseño. Fue redactora para Vogue Nueva York y columnista para diversos medios de comunicación en México. Desde los años setenta hasta el día de hoy, Anna ha estado vinculada con las mejores y más importantes plataformas de moda en nuestro país. Su carrera se expande por al menos 45 años.
La escuela de Diseño y de la Licenciatura en Moda, Innovación y Tendencia de la Universidad Anáhuac de Querétaro trajo su experiencia con la cátedra Las Vivencias de la Moda Mexicana en la que pudimos tener un encuentro exclusivo con ella y ahondar sobre sus consideraciones de la moda:
¿Qué piensas de ser nombrada como “La Anna Wintour de México”?
Pienso que es un error, pero es un honor. Ojalá que la industria de la moda mexicana fuera como la americana que produce “Anna Wintours”, porque ella es quizá la más poderosa, pero hay muchas otras editoras muy poderosas que son producto de un sistema. Pero de ninguna manera, ni mi papá fue el dueño del Tatler, ni vengo con esa fuerza que tiene Anna, en un punto tal vez sí se puede decir porque sí me gusta buscar y encontrar a diseñadores, siempre digo lo que pienso, mucha gente me detesta y creo que a ella también, y nuestros nombres se escriben igual, ese es el gran paralelo, pero de ninguna manera.
La tendencia que se ha visto en los últimos años en la moda mexicana más popular han sido aplicaciones con tejidos y texturas artesanales folklóricas, muchas veces buscando colaborar con artesanos indígenas ¿Crees que se deba continuar con este estilo o cuál crees que sea el siguiente paso para la moda “mexicana”?
No, yo creo que es muy fácil agarrar un bordado y pegárselo a algo, eso no es diseñar, eso es explotar un momento, y creo que ya estuvo suave. No es cierto que al trabajar con artesanas les van a cambiar la vida, muchas veces las artesanas ya les agarraron la medida a los estudiantes y jóvenes diseñadores y los hacen como quieren. Hay muy buenas diseñadoras que integran el proceso artesanal a su propuesta que son Carmen Rión, Carla Fernández, Denisse Kuri en Puebla, Lidia Ladín desde luego, que hace muy buena labor con todas las comunidades, pero esto de nada mas andar ahí siguiéndoles el paso y sólo hacer un pegote de bordados y me lo tienes que comprar porque es un bordado mexicano, ya pasó. Hay demasiada oferta, lo que tienen que hacer los que se quieren quedar en ese rubro es reinventarse, evolucionar y escoger una manera diferente de insertar esta propuesta artesanal a sus diseños. Ése es el gran reto, el poder llegar a una sofisticación y sutileza que ya empieza a verse en algunos diseñadores. Aparte ahora ya todos los bordados son de máquina, porque no hay artesana que alcance para hacer tantas bolsas, y te descuidas y abres una bolsa y está hecha en China. Yo te lo voy a comprar si me gusta, no por tu banderita de esto es artesanal y está hecho en México ¡cómprame!, los diseñadores no pueden usar eso como una herramienta de venta.
¿Cuál crees que es la principal cualidad que debe tener un diseñador mexicano para sobresalir hoy en día?
No es un diseñador mexicano, es la cualidad que debe tener un diseñador, punto. Obviamente tienes que tener talento y cierta genialidad para hacer las cosas, pero además tienes que tener infraestructura, toda una base de conocimiento de costura, patronaje y demás, que aunadas a tu talento te van a hacer diferente. No podría mencionar una cualidad porque es un conjunto, debes ser muy observador de lo urbano, estar pegado a la red, entender a tu consumidor y otras herramientas. Yo considero que el patronaje es muy importante, te permite como diseñador hacer propuestas creativas. Alexander McQueen era un magnifico creador, sí, pero era un técnico extraordinario, traía una educación que no salió de la nada. Todos traen una cantidad de bagaje técnico, cultural, etc. que hoy en día la gente se lo pasa por el expediente, hay diseñadores que no van al cine para ver los vestuarios, que no ponen un pie en un museo. Tú no puedes ser un diseñador y ser inculto, esto no significa que no pueda haber gente autóctona, autodidacta que tenga una sensibilidad que les permita usar su herencia, pero en general te tienes que educar, te nutre, te hace crecer y entender el entorno y tu propio ser, tu talento y tus inclinaciones. Lo que es maravilloso es que hoy en día gente joven tiene la oportunidad de viajar muchísimo, y al viajar vas adquiriendo una “pátina de la experiencia” interactuando con otras personas, pero si vas a viajar para meterte a todos los bares en Barcelona y no ves la arquitectura, pues tenemos un problema ¿no?
Me podrías contar sobre tres diseñadores mexicanos creas que vale la pena conocer y ¿por qué?
Mis consen son los “Malafacha” que son altamente propositivos muy originales, investigan muchísimo, sus colecciones traen un trasfondo intelectual y cultural que no te la crees. Y por eso sus desfiles son tan espectaculares y además entienden lo que es un show, los maquillajes, los peinados, los accesorios, esta cuestión de no saber si es hombre o mujer, están muy avanzados, van muy bien. Pero además de esto tienen su línea comercial muy aterrizada.
Trista, que te puedo decir José Alfredo Silva es también otra persona muy dedicada que hace mucha investigación, es fundamental. Acaba de hacer una exposición de los 10 años de Trista en la Roma y te das cuenta de todos los procesos que llevan a esta prenda en la pasarela, no fue algo de échate un dibujito y vamos a sacar el patrón y dáselo a doña chula a que lo cosa. Son procesos de estudio muy profundos.
Mi amiga Carmen Rión me encanta obviamente, pero ellos no son los nuevos, porque un diseñador a mi criterio, se tarda 10 o 12 años para llegar a un punto así. De los más jóvenes todavía no encuentro uno que realmente me mate, que diga quiero todo, pero también hay otros que sabes que van a madurar muy rápido porque viene con un bagaje de estudios, tienen un inversionista y no van a tener que sufrir como muchos otros.
Es un magnífico momento para la moda mexicana porque tienen las ventajas de las redes sociales, la posibilidad de comercializar online, ser tu propio promotor mediático, porque con una camarita o un teléfono puedes hacer un video y subirlo a las redes y si a la gente le gusta vas a tener una cantidad enorme de retroalimentación y te puedes ahorrar el estar en un fashion week, aunque a todos nos gusta el glamour, el show y el circo maroma y moda.
¿Qué tendencia actual te gustaría que desapareciera y que tendencia te gustaría que volviera?
Es generacional, pero sería esta moda de entre más feo me veo mejor, que la gente ande con calcetines y zapatos feos. Es como esta contracorriente que viene como una especie de ruptura de las nuevas generaciones. Me cuesta mucho trabajo aceptarlo, yo la primera vez que vi la colección de Alessandro Michele o las colecciones de Prada pensé que son horribles, nunca me han gustado, pero me doy cuenta que es una percepción mía no una percepción de análisis de éxito o de estética. También una cosa es si eres un europeo de 1.85 rubio de ojo verde y te pones todas las cosas de Gucci a que si mides 1.64 y tienes otros orígenes, como dice un amigo “hay feos y se lo alborotan”. Pero no pasa nada, cierro los ojos y no pasa nada.
No me gustaría que regresara ninguna, yo creo la moda tiene que siempre ir viendo hacia delante, pero en lo personal me encanta todo lo hippie, me encanta cómo la gente se disfraza para los grandes festivales, ésta moda de los indios americanos con las grecas y los flecos, además en la moda todo regresa, todo es cíclico. Hoy en día hay más consumidores de nicho, antes era una dictadura, Christian Dior, Chanel, y quizás otros 10 diseñadores más dictaban la moda. Hoy nadie dicta, se hace con la moda su regalada gana, porque la gente ahora la interviene, la rompe, la combina y cada quien se expresa a su manera.
¿Qué sugerirías como solución para el consumismo y la contaminación que genera “fast fashion”?
La nueva generación Z, son niños con capacidad de consumo a los 13 años, nacen con el celular pegado, y con mayor conciencia ecológica, se les bombardea con noticias catastróficas del fin del mundo y ellos son selectivos en lo que escuchan, “Los popotes le hacen daño a las tortugas”, “A las vacas las torturan y contaminan más que los coches”, y empiezan a hacer estos movimientos porque quieren cuidar su planeta, yo creo que de ahí va a venir la solución. Hay un “push” hacia eso y las marcas están respondiendo. Yo lo veo con las nietas de mi marido, han reducido su guarda ropa a 10 cosas en el momento que se dieron cuenta que ellas eran corresponsables del problema, ese es un ejemplo que yo veo, pero en sociedades más avanzadas empieza a haber este patrón de conducta.
It Girls, ¿cuál es tu favorita?
¡Ay! ninguna, la verdad son tantas, son un producto comercial, producto de las redes, ese mírame como me vestí el día de hoy me parece lo más vacío del mundo. El problema de hoy en día es que ya todos son expertos, todos son bloggers, expertos en tendencia, fotógrafos, image makers, influencers, hay tantos allá afuera que ¿quién va a consumir lo que ellos producen si ya todos producen?, eso de repente se va a colapsar, ya no van a tener esa importancia del “click to action”.
¿Cuál crees que es el futuro de la moda andrógina?
Pues volviendo a la generación Z, es una cosa genderless, que es intercambiable, para los nuevos diseñadores es muy práctico porque ya sólo hacen una colección, ésta generación más joven a lo mejor no siente que la ropa es un instrumento de seducción, andan en otro rollo. Se llamó unisex, se llamó andrógino y ahora es genderless, tendrá su momento y seguirá.
Fast Questions:
¿Cuero o encaje? Cuero
¿Nuevo o vintage? Nuevo
¿Estampados o colores sólidos? Colores sólidos
¿Tacones o flats? Flats
¿“Less is more” o como diría Iris Apfel “more is more”? Aunque me encanta Iris Apfel, less is more.
¿Cuál es tu Libro favorito? Mi libro favorito es el que estoy leyendo en ese momento.