Prensa extranjera en Perú condena los asesinatos de periodistas en México
Según Reporteros sin Fronteras, México es, después de Siria y Afganistán, el país más peligroso para ejercer el periodismo
Foto: Especial
EFEMEX
La Asociación de Prensa Extranjera en el Perú (APEP) condenó los asesinatos impunes de periodistas en México, cuyo más reciente caso es el de Javier Valdez el pasado lunes, y pidió a sus autoridades crear las condiciones de seguridad para ejercer el periodismo, en un comunicado difundido hoy en Lima.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos, desde 2000, 126 periodistas han sido asesinados en México, a raíz de lo cual los comunicadores mexicanos han solicitado la solidaridad internacional para lograr que los responsables de los reiterados e impunes asesinatos de periodistas en ese país sean identificados y sancionados, indicó APEP.
La asociación se sumó a la condena internacional tras el asesinato de Javier Valdez Cárdenas en Culiacán, Sinaloa, y solicitó a las autoridades de México “crear las condiciones de seguridad para el ejercicio del periodismo en ese país e identificar y sancionar a los responsables de la violencia contra periodistas, que constituye un grave atentado contra la libertad de prensa”.
El gremio periodístico destacó que Valdez era el director-fundador del semanario Ríodoce, corresponsal del diario La Jornada en Sinaloa y colaborador de la Agencia France Presse.
“Con valentía documentó el poder del narcotráfico y del crimen organizado en el estado de Sinaloa, las víctimas, y la corrupción estatal”, agregó APEP sobre Valdez, que fue galardonado con el premio Maria Moors Cabot de la Universidad de Columbia en 2011, y el premio internacional de Libertad de Prensa del Comité de Protección de Periodistas.
Tras el asesinato en marzo pasado de la periodista Miroslava Breach en Chihuahua, Valdez había comentado, según recordó APEP, que “a Miroslava la mataron por lengua larga. Que nos maten a todos si esa es la condena de muerte por reportear este infierno. No al silencio”.
Según Reporteros sin Fronteras, México es, después de Siria y Afganistán, el país más peligroso para ejercer el periodismo.
