Club de Golf Malanquin, una inversión en San Miguel de Allende

Quien sabe de golf y lo practica en la región del Bajío mexicano, seguro ha jugado en el Club de Golf Malanquin, el más importante de San Miguel de Allende. Sus 18 hoyos con 7289 yardas, que se extienden a lo largo y ancho de 50 hectáreas, son un reto incluso para el profesional David De Anda, quien, a pesar de llevar más de dos décadas en Malanquin, asegura sigue encontrando retos en cada vuelta que da al campo, que califica como difícil de jugar por su topografía accidentada, y sus fairways angostos y delimitados por árboles, que orillan al jugador a maniobrar y a tirar con mucha precisión. El campo es par 72 y fue diseñado por el arquitecto estadounidense Steven Newgent.

Además de los servicios de práctica con los que cuenta el campo de golf, entre estos tee de práctica, putting green, renta de carritos y equipo, clínicas de golf y caddie house, en sus instalaciones, Malanquin cuenta con seis canchas para jugar tenis sobre arcilla, alberca semiolímpica, gimnasio, cancha de fútbol y un espacio de usos múltiples en el que se realizan clases de yoga, aeróbics y pilates, entre otras actividades. Malanquin es un campo concurrido, tanto por familias mexicanas como por la gran comunidad extranjera, principalmente estadounidense y canadiense, que reside de manera permanente o temporal en la zona de San Miguel de Allende.

En vísperas del 50 aniversario de la fundación de Malanquin, sus socios han desarrollado un ambicioso proyecto que, a decir de José Luis Bribiesca Mojica, presidente del consejo, le dará un importante valor agregado al club: la construcción de una casa club totalmente renovada que ofrecerá, mejorados, los servicios de restaurante, snack bar, cafetería, baños con vapor y área infantil con los que actualmente cuenta. Para poder alcanzar su objetivo, Malanquin está en busca de nuevos socios inversionistas, sin embargo Bribiesca asegura que actualmente, cuando el proyecto aún no ha comenzado a construirse, es el mejor momento para adquirir una acción pues “en el momento en el que se ponga la primera piedra, los precios empezarán a subir”.

La riqueza histórica y cultural de San Miguel de Allende han hecho de esta ciudad guanajuantense uno de los destinos turísticos mexicanos más cotizados a nivel internacional, lo cual ha derivado también en un desarrollo significativo del sector servicios, con propuestas interesantes en hoteles y restaurantes. Su espíritu relajado y bohemio la convirtieron, hace ya algunos años, en uno de los epicentros artísticos de la zona, a la vez que, por su formar parte del corredor central industrial, tiene gran relevancia económica para la región. Por estas y muchas otras razones San Miguel de Allende es una de las ciudades con mayor plusvalía de México, y hoy el Club de Golf Malanquin es una oportunidad de inversión que, quienes estén considerando esta demarcación para adquirir bienes, no deben desestimar.