Zibatá Golf, retomando la esencia del deporte
El campo de Zibatá Golf se encuentra en una comunidad planeada: Zibatá. No hace falta más que llegar, dejarse envolver por el silencio, el aire limpio y las vistas panorámicas hacia el valle de Amazcala para sentirse privilegiado y disfrutar de una práctica que retoma los principios esenciales de un deporte muy exigente.
En uno de los desarrollos inmobiliarios más nuevos de Querétaro se encuentra Zibatá Golf, un campo de golf abierto al público. Para Gavin Robinson, golfista profesional irlandés que, desde su inauguración en 2013, dirige y opera el campo, así como la academia de golf que alberga, el principal objetivo del campo es retomar la esencia del deporte, lo cual significa ofrecer al golfista la posibilidad de desconectar y concentrarse plenamente en su práctica, con el privilegio de estar rodeado siempre de naturaleza.
Gavin llegó a México a principios de la década pasada, trabajó en campos de la Ciudad de México y de Guadalajara, sin embargo cree que en Querétaro encontró su destino. En entrevista, explicó que a diferencia de la mayoría de los campos de golf de ciudad en México que no son público, Zibatá rompe el paradigma de la experiencia del golf, ya que se vuelve más accesible.
Gavin Robinson piensa que, desde que el deporte llegó a México hace más de 100 años, su práctica en el país se ha alejado de los preceptos iniciales del deporte con vicios como el uso excesivo del carrito, el juego lento y el consumo de alcohol. Asegura que más allá de juzgar esta manera de disfrutar el golf, la intención es ofrecer al golfista opciones que le permitan desarrollar mejor su juego.
«El concepto de un campo público es diferente, es para promover el juego, para hacer crecer el juego. Es accesible en muchos términos: no hay restricciones para entrar, no hay investigación sobre la persona que quiera usarlo, no hay membresías, no hay acciones» y aunque dicho concepto ha tenido sus detractores, el director del campo asegura que las expectativas en los primeros años de funcionamiento de Zibatá Golf se han superado; al mes se juegan mil 500 rondas, lo cual, para un campo de 9 hoyos, es una cifra muy alta. Robinson estima que, para junio de 2017, cuando estén listos los 18 hoyos, la recepción será aún mejor.
Una de las mejores instalaciones del campo, es su tee de práctica. Se trata de un espacio que actualmente puede ser usado por 35 personas al mismo tiempo y que, en los próximos tres años, será ampliado para recibir al doble de practicantes. Tiene 350 yardas de largo, lo cual es adecuado para los equipos de golf de hoy en día, que producen tiros cada vez más largos, y está acondicionado con varios greenes de ryegrass como objetivos, los cuales, de acuerdo con Robinson, hacen la práctica del golf más real. Además cuenta con un putting green de 9 hoyos, un green de approach con trampa de arena y, ante todo, una vista espectacular.
El éxito del tee se ve reflejado en la gran afluencia de golfistas que practican en él y que, a la semana, llegan a ser más de 500, «nos han comentado varios clientes que es el mejor de Querétaro», puntualiza Robinson.
El campo fue diseñado por el arquitecto y profesional del golf Rafael Alarcón, quien fuera entrenador de la golfista mexicana Lorena Ochoa y que ya ha diseñado varios campos en México, en colaboración con Carter Morrish. De faiways amplios y una longitud de 7 mil 584 yardas, el campo es retador sin dejar de ser disfrutable. Actualmente, por contar solo con 9 hoyos, únicamente alberga el Torneo Anáhuac – Zibatá, que se realiza cada octubre.
