Marco Estrada va por más historia

El 11 de octubre de 2015 empezó a tomar rumbo definitivo el andar del pitcher mexicano Marco Estrada en las Grandes Ligas. Con la Serie Divisional de la Liga Americana a favor de los Rangers de Texas dos juegos a cero, el lanzador mexicano, de 32 años entonces, subió al montículo para imponer condiciones y realizar, lo que hasta ese momento se consideró, la más afortunada y contundente presentación que hubiera tenido como abridor de los Azulejos de Toronto, atrayendo hacia él la atención nacional de los medios de comunicación en los Estados Unidos.

Toronto, se encontraba en camino, como ahora, para tratar de romper una racha de 22 (ahora, 23) años sin llegar a la Serie Mundial, y para lograr el objetivo, tendría que dejar en el camino a los Rangers de Texas. La aportación del sonorense, nacido en Ciudad Obregón el 5 de julio de 1983 fue crucial. Durante 6 entradas y un tercio se mantuvo gigante en el montículo, admitiendo sólo una carrera y comandando el regreso de los Pájaros Azules que triunfaron esa noche y dos veces más, para derrotar 3-2 en la Serie Divisional a los texanos.

Los Azulejos siguen aún viviendo del recuerdo de sus dos títulos de las Grandes Ligas obtenidas en 1992 y 1993, y el año pasado fueron derrotados en seis juegos por los Reales de Kansas City.  Pero ahora, como el propio manager John Gibbons lo ha mostrado al volver a darle la pelota para el juego número uno de la Serie de Campeonato de la Liga Americana que empieza mañana ante los Indios en Cleveland, la confianza en el lanzador mexicano es absoluta. Con un record de 3-1 y 2.68 de efectividad en ocho salidas en postemporada, incluyendo 4 aperturas, todas con los Azulejos, Marco “es la elección”. Marco hizo también 4 presentaciones de postemporada como relevista en sus días con los Cerveceros de Milwaukee.

De acuerdo con lo que dijo Gibbons el martes cuando anunció que repetiría al mexicano en el juego uno, tal y como sucedió el año pasado ante Kansas; Marco es la mejor alternativa, y quizá, el pitcher que más necesita lanzar en un proceso normal de descanso. “Ni un día más”, considerando que tanto Toronto como los Indios barrieron en sus respectivas series, estos días de descanso adicionales son buenos para casi todos, menos para los lanzadores a quienes se les rompe el ritmo de trabajo.

Hace un año, el 11 de octubre, Marco enfrentó a los Rangers como apuntamos y evitó la eliminación. Sin embargo, en la única derrota que ha sufrido en postemporada como abridor, abrió la Serie de Campeonato del 2015 y fue derrotado al tiempo que los Azulejos caían 5-0 ante los Reales. Sin embargo, el día 21, y con la Serie en contra 3-1, subió de nuevo al montículo a verse las caras con los Reales, a los que esta vez dominó aceptando sólo una carrera en 7 entradas y 2 tercios, alargando el compromiso al menos a seis juegos con el triunfo 7-1 de Toronto.

Esa noche, Marco pasó a la historia, al ser el segundo pitcher en enfrentar al mínimo de bateadores enemigos en 6 entradas y dos tercios, algo que no pasaba para un abridor en la Liga Americana en postemporada, desde que Don Larsen lanzara su juego perfecto en 1956.

OTRO AÑO PARA RECORDAR. Y si el año pasado estuvo lleno de momentos memorables, este no lo ha sido menos. El 10 de abril pasado debutó esta campaña lanzando 7 entradas completas dejando en cero a los Medias Rojas de Boston, en el triunfo de los Azulejos 3-0, en lo que fue la apertura número 100 de su carrera.

Luego, el pasado 15 de junio, marcó un récord de los Azulejos al sumar 10 aperturas consecutivas admitiendo 5 hits o menos y el 21 de junio, impuso récord de las Grandes Ligas al sumar 11 aperturas lanzando al menos seis entradas y admitiendo 5 hits o menos.

Apenas la semana pasada en el Juego 1 de la Serie Divisional ante los Rangers, se quedó a sólo 2 outs de completar la blanqueada antes de que Elvis Andrus conectara un triple, aunque si se llevó el triunfo con sólo una carrera admitida en la vitoria de los Azulejos 10-1.

MAÑANA. Marco estará enfrentando a los Indios, que ganaron 4 de los 7 juegos en los que se enfrentaron a los Azulejos, incluyendo los tres de la serie celebrada en Cleveland en Agosto pasado y que se definieron por sólo una carrera. Los Indios están a la caza de dar a Cleveland su segundo título de un deporte nacional en el año, después de que los Cavaliers se coronaran en la NBA, terminando con una racha de 52 años sin victorias, desde que los Cafés ganaron el título de la NFL en 1964.

Estrada a quien ya le llaman el “artista del cambio de velocidad”, tuvo este año el mejor record de elevados al cuadro de las Mayores, algo que es considerado tan efectivo para prevenir carreras como los propios strikes. En las últimas dos campañas, Estrada tuvo el menor promedio de bateo de sus rivales entre todos los pitchers abridores de la Liga Americana, siendo superado en ese terreno sólo por las super estrellas de la Liga Nacional Calyton Kershaw, Jake Arrieta y Max Scherzer.