Viajar es necesario para escribir: Nooteboom

Por Juan Carlos Franco

“Nooteboom es uno de los pioneros de la crónica, 50 años antes de que se pusiera de moda”. Fue así que terminó Xavier Ayán su entrevista a Cees Nooteboom, uno de los escritores europeos más importantes de la actualidad.

Eterno contendiente al Premio Nobel de Literatura, el novelista, poeta y periodista holandés participó este viernes 2 de septiembre en el Teatro de la Ciudad como parte del Hay Festival Querétaro 2016. Con un sentido del humor brillante y relajado, hizo un repaso por su historia como escritor, que se mezcla en todo momento con su historia personal.

“El primer acontecimiento político de mi vida fue la Segunda Guerra Mundial, cuando tenía siete años”, y recuerda cómo, ante un ataque británico a una base aérea en su país, pudo ver el bombardeo desde un lugar privilegiado. “Mi padre puso una silla como esta en el balcón para mirar la batalla”. Esta es la primera de las muchas anécdotas que, en tan sólo 60 minutos, el escritor pudo compartir con el auditorio.

Nooteboom es un hombre lleno de historias, y son historias que le han dado los interminables viajes que ha hecho alrededor del mundo desde los 17 años. Con un español seguro pero avasallado por el peso de la lengua materna, habló sobre su visita a Hungría durante la revolución, a la Bolivia del ‘Che’ Guevara y los constantes viajes a España que fueron el germen de la que quizás sea su obra más importante: “El desvío a Santiago”.

“Nunca viajo con un plan. Me gustan los desvíos. A los británicos y los estadounidenses no les ha gustado la idea del desvío, por eso le cambiaron el título a Roads to Santiago”. También habló del 68 en París, de la caída del Muro de Berlín –“Por una coincidencia increíble, yo estuve ahí”- y del México contaminado de finales de los 80.

Ante todo, su literatura es una literatura del tránsito. Su primer viaje, plasmado en “Philip y los otros” (publicado, como todas sus traducciones castellanas, en Siruela), y a partir de esa experiencia sus viajes han sido el motor para la escritura. A medio camino entre la ficción y la no-ficción, autor capaz de abarcar un gran número de géneros y mezclarlos en textos inclasificables, Nooteboom, sin embargo, no es tan leído como otros autores cercanos al Nobel como Murakami, Handke, Mc Carthy, Oates, Aira o Thiong’o.

Su último libro, “El Bosco: un oscuro presentimiento”, es una exploración sobre los misterios del pintor flamenco. Para escribirlo, Nooteboom viajó a varios países para visitar los museos que albergan sus piezas. En “El jardín de las delicias”, la obra maestra del pintor, descubrió una imagen que le llevó, en última instancia, al subtítulo de su estudio: la progresión de la crucifixión de Cristo hacia las escenas sexuales que concluyen, en el último panel, con la violencia: tortura, incendios, guerra.

“Para lo que no estaba preparado era para la violencia”, escribió en sus cuadernos de juventud frente a los incidentes que observó en sus primeros viajes como periodista. “Para los mexicanos debe ser muy difícil soportar lo que pasa”.

Finalmente, Cees Nooteboom estará también en el evento “Recordando a los grandes: Shakespeare, Cervantes y el Inca Garcilaso” junto con JMG Le Clézio y Margo Glantz en conversación con Gaby Wood. La cita es en el Teatro de la Ciudad el domingo 4 a las 11:00 hrs.

Twitter: @juandearcadia