En mayo desapareció más de una persona al día en Querétaro, denuncian activistas
Aleida Quintana, activista de grupo T’ek’ei “Grupo interdisciplinario por la equidad”, dijo que tuvo que abandonar el estado por amenazas
Basada en cifras de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), Aleida Quintana Ordaz, defensora de los derechos humanos en Querétaro, dio a conocer que tan solo en mayo de este año se han reportado 40 personas desaparecidas en la entidad, es decir, más de una persona diaria.
“Recientemente, a través de un monitoreo constante a la página de la Procuraduría tenemos el dato de que en mayo de 2015 fueron reportadas como desaparecidas 40 personas, es decir que estamos hablando de más de una persona diaria“, expuso.
En conferencia de prensa, la activista –quien denunció que tuvo que dejar el estado por recibir amenazas debido a su actividad- detalló que los desaparecidos en Querétaro son un tema incómodo que “representa una amenaza a muchos intereses“.
Quintana recordó que en 2013 se reportaron 56 niñas desaparecidas, mientras que a través de una solicitud de acceso a la información se pudo conocer que se reportaron mil 270 mujeres desaparecidas de 2009 a 2013.
Tras haber recordado que desde junio de 2013 comenzó el hostigamiento hacia su persona, informó que será en los próximos días cuando se reúna con personal de la Secretaría de Gobierno donde se solicitarán medidas cautelares para su protección.
Relató que fue hasta 2014 cuando se dio cuenta que era vigilada y se le fotografiaba sin su permiso, y añadió que por ese motivo ya está en proceso la denuncia correspondiente, sin embargo expresó que de momento no puede dar nombres de los funcionarios quienes la intimidaron.
Nuevamente desmintió que haya habido un ofrecimiento de protección por parte del gobierno de Querétaro, por lo que con apoyo de organizaciones a nivel nacional e internacional cuenta por ahora con un plan de seguridad.
Aleida Quintana, quien forma parte de T’ek’ei “Grupo interdisciplinario por la equidad” que da seguimiento a las desapariciones en Querétaro, dijo que su caso no es único dado que hay otros activistas en pro de los derechos humanos que también han sido amedrentados a fin de que cesen sus labores. Sin embargo, añadió que si no han sido dados a conocer es porque los afectados no lo desean.
“Mi labor es digna y creo que lo principal, el primer paso, es la denuncia pública. Lo hago para que la sociedad se entere de que en el estado suceden cosas que las defensoras no tenemos que pasar esto“, exaltó.