Estados Unidos repatrió a casi 227 mil mexicanos en 2014; la cifra más baja en 5 años
El descenso en el número de repatriados se da luego de la ‘acción ejecutiva’ del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que pidió repatriar a delincuentes y no a indocumentados que son padres de ciudadanos estadunidenses
En 2014, Estados Unidos realizó la repatriación de un total de 226 mil 977 mexicanos, de acuerdo con el documento “Eventos de repatriación de mexicanos desde Estados Unidos, según entidad federativa de origen y sexo, 2014” emitido por la Unidad de Política Migratoria de la secretaría de Gobernación.
La cifra es la más baja de los últimos cinco años si comparamos los números de 2010 a 2014 reportados por la dependencia.
Migrantes mexicanos deportados por año:
2010: 469 mil 268
2011: 405 mil 457
2012: 369 mil 492
2013: 332 mil 865
2014: 226 mil 977
En el caso de Querétaro, el número de deportados de 2010 a 2014 son los siguientes:
2010: 6 mil 780
2011: 6 mil 615
2012: 5 mil 291
2013: 5 mil 084
2014: 3 mil 496
El descenso en la cifra se da luego de que en noviembre de 2014, Barack Obama, presidente de Estados Unidos, ordenara a las autoridades de inmigración de ese país que deportaran a los delincuentes y no a las familias. En esa ocasión, Obama hizo uso de su poder ejecutivo para “escudar” a cinco millones de inmigrantes ilegales, en el que fue llamado el mayor cambio en el sistema inmigratorio de ese país en décadas.
Un elemento clave en el plan de migración de Obama fue para priorizar la expulsión de miembros de pandillas, delincuentes y sospechosos en vez de indocumentados que cumplen la ley y que son padres de ciudadanos estadounidenses.
La medida fue recibida con un amplio rechazo de los legisladores republicanos.
El 16 de diciembre de 2014, un juez federal de Pensilvania declaró inconstitucional la acción ejecutiva del presidente Barack Obama que protege de la deportación a entre 4.5 y 5 millones de indocumentados, como parte de una sentencia sobre un caso penal de un inmigrante hondureño acusado de conducir bajo los efectos del alcohol.
Esta es la primera decisión judicial contra la regularización de indocumentados anunciada por el mandatario, una medida que ha soliviantado a la oposición republicana y que abre una nueva batalla en el Congreso, controlado por los conservadores a partir de enero.