Reforma en materia de Movilidad Universal no limita el derecho a la manifestación: Marcos Aguilar

La reforma constitucional aprobada este martes en la Cámara de Diputados federal es a los artículos 11 y 73, y tiene que ver con el derecho a la movilidad universal, y pretende beneficiar de manera especial al peatón, seguido del transporte en vehículos no motorizados, el transporte público en todas sus modalidades, y finalmente el transporte privado, explicó Marcos Aguilar Vega, diputado federal del Partido Acción Nacional (PAN) y autor de la reforma.

“Se establecen principios y bases que deberán estar regulados en una ley general que permitan uniformar los criterios en todo el país, me refiero a los principios de igualdad, accesibilidad, disponibilidad y sustentabilidad. Son cuatro elementos que están directamente vinculados con el derecho a la movilidad como derecho humano, y a través de la ley general de movilidad quedará debidamente conceptualizado el tema relativo a movilidad, bases y principios, y la forma en que los estados de la República, así como los municipios, deberán atender este asunto”, expuso.

El legislador queretano descartó, como lo han afirmado diputados de izquierda y algunos medios de comunicación, que la reforma sea una ventana para que en una legislación secundaria pueda limitarse el derecho a la manifestación, pues la reforma constitucional aprobada no toca los artículos 6 y 9, que son los que hablan de ese tema.

“Es una reforma que no prohíbe ni coarta el derecho de libre expresión, de reunión o asociación establecidos en el artículo 6 y 9 de la Constitución Política. La izquierda que ha pronunciado que está en contra de la reforma, en relación con dos hechos específicos. La primera es que la izquierda votó a favor en la Comisión de Puntos Constitucionales el dictamen que el día de ayer fue votado por el pleno de la Cámara de Diputados, y segundo, el derecho a la movilidad es un tema que ha venido enarbolado desde el gobierno del Distrito Federal”, anotó.

Aguilar Vega insistió en que no es una ley antimarchas, sino una reforma que ayudará a ordenar el desarrollo y el crecimiento urbano y la capacidad de desplazamiento de las personas.