América está en semifinales

Bien dice el famoso dicho “El que perdona pierde”, y eso perdurará por mucho tiempo en la memoria de los aficionados a los Pumas. Y es que cuando todo parecía indicar que el cuadro universitario una vez más iba a imponerse a las Águilas; el defensa Paolo Goltz, aprovechó la débil marca para poner el 1-0 que mandó a los azulcremas a las semifinales del Apertura 2014.
En un pletórico Estadio Azteca, donde ambas aficiones demostraron que el Clásico del orgullo es la que prende a la capital del país, fue marco de un partido intenso, con garra, determinación y el cuál no estuvo exento de errores, algunos en la definición y otros más graves en la marcación que dejó el triunfo definitivo por la mínima al conjunto de Antonio Mohamed, que al parecer tiene una semana más de crédito con la directiva y afición de Coapa, para buscar el título de Liga ante un irregular funcionamiento de su equipo prácticamente todo el presente torneo.
Con el silbatazo inicial, América dejó en claro que su intención era atacar y marcar el gol que lo colocara de manera inmediata en semifinales, probando incluso de larga distancia al joven guardameta de los Pumas, Alfredo Saldivar, quien cubrió la ausencia por lesión en el partido de ida de Alejandro Palacios, sin embargo, los arribos de Ruben Sambueza, quien regresó a la actividad tras una lesión, Oribe Peralta, Paul Aguilar y Miguel Layún, se encontraron en todas las oportunidades con las manos del portero o las piernas y cabezas de los defensores que alejaban el peligro.
Bastó el primer cuarto de hora para que Pumas se acomodara sobre el terreno de juego, comenzó a hacerse del balón y a mostrar el juego que lo llevaron a la victoria en los últimos tres juegos, primero, Dante López tuvo al minuto 15 una oportunidad en un disparo que fue bien desviado por Moisés Muñoz a tiro de esquina, posteriormente con un potente tiro de Ismael Sosa que también requirió del esfuerzo del cancerbero para evitar la caída de su marco.
En varias ocasiones Dante López tuvo en Paul Aguilar a un espectador más, ya que el carrilero americanista fue incapaz de detener cada arribo del delantero paraguayo por el sector izquierdo, que durante la primera parte fue la vía de ataque felino, aunque sin éxito para dejar el marcador con empate a cero goles, pero con la ventaja en el global para Pumas.
Para segunda mitad, Antonio Mohamed dio ingreso a Gonzalo Díaz, quien vio escasos minutos durante el torneo regular, pero con la calidad del creativo trataron de imponer condiciones.
Universidad pese a la mayor posesión del esférico por parte de América no desesperó y de nueva cuenta se acomodó sobre la cancha y empezó a crear las mejores ocasiones de gol sobre el marco de Muñoz.
Durante los 20 primeros minutos de la parte complementaria, los auriazules crearon tres jugadas de gol, que de haber convertido otra sería la historia, sin embargo, las buenas intervenciones del portero americanista, aunadas a la falta de puntería de Ismael Sosa y Eduardo Herrera, ahogaban los gritos de gol en la garganta de los aficionados Puma, que hicieron del Estadio Azteca una sucursal del Olímpico Universitario.
Las fallas de la visita se terminaron pagando caro. En un tiro de esquina al minuto 75, Gonzalo Díaz mandó un centro al corazón del área que sólo encontró a Paolo Goltz quien sin mayor inconveniente, acomodó al ángulo inferior izquierdo de Alfredo Saldivar, para desatar el júbilo en los miles de americanistas que se dieron cita en el Coloso de Santa Úrsula.
Pese a que Universidad tenía 15 minutos por delante para buscar un gol que obligara a las Águilas a marcar dos más; no lograron crear peligro en la meta local, un inofensivo Daniel Ludueña, quien ingresó en la segunda mitad junto al juvenil Daniel Ramírez, quien también fue carente de ideas para buscar el gol de visitante que marcaría la diferencia, no marcaron peligro para el boleto del América a semifinales con el empate a un gol en global, pero con su mejor ubicación en la Tabla General a lo largo del Apertura, sacaron adelante la eliminatoria.
Los de Coapa esperan rival, que saldrá entre Monterrey, Chiapas o Toluca.