Camioneta de hombre asesinado en Querétaro había sido baleada en Celaya

Una camioneta propiedad de Juan Luis Rendón Granados, quien falleció el sábado en Querétaro a consecuencia de varios disparos, había sido baleada en Celaya a finales de agosto pasado.

De acuerdo con información publicada por El Sol del Bajío, el empresario y dueño de la compañía de vidrios Macrivcel era el propietario de un automóvil que fue baleado la noche del 27 de agosto.

“Hasta ayer se desconocía la identidad de los autores del atentado, únicamente se corroboró la información inicial, de que quienes dispararon eran dos personas que viajaban en una camioneta Chevrolet Silverado, color blanco, la cual se encontró abandonada metros más adelante”, publicó el diario.

El periódico añadió que el tiroteo iba dirigido a una persona.

“El subprocurador de Justicia en la región C, Armando Amaro Vallejo, dijo que en la información inicial se estableció que el tiroteo en la avenida Torres Landa era dirigido a una persona, de quien hasta ese momento se desconocía su identidad, pero que no había sufrido daño alguno, porque no se hallaron evidencias de ello”, añadió El Sol del Bajío.

Las autoridades policiacas locales constataron que la camioneta de la marca Grand Cherokee, color plata, presentó cuatro impactos por arma de fuego, y que todo parecía indicar que el ataque iba dirigido al propietario de la misma, lo cual se corroboró desde esa misma noche, después de los hechos.

Sobre los autores del atentado, el periódico reportó

“Testimonios de los testigos señalan que de un vehículo, al parecer una camioneta doble cabina de color blanco, dos sujetos habían pasado por dicho lugar y habían realizado las detonaciones, más adelante a la altura del número 705 habían abandonado la camioneta de donde habían disparado, hallazgo que también fue corroborado“, informó el subprocurador de Justicia en la región C, Armando Amaro Vallejo.

En el interior de la camioneta Chevrolet Silverado, color blanco, se encontraron dos armas de fuego, una calibre 9 milímetros y otra calibre .38 súper, ambas con su cargador y casquillos útiles, nueve en la primera y seis en la segunda.

Además de las armas se localizaron casquillos percutidos, evidencia con la que se estableció que desde el interior de la camioneta se realizaron las detonaciones mientras estaba en movimiento. De las investigaciones que han realizado hasta el momento dicho vehículo no cuenta con reporte de robo.

Ayer por la mañana se presentó, ante la agencia del Ministerio Público de turno, Juan Luis Rendón Granados, propietario de Macrivcel, a dar su versión de los hechos y a pedirles a las autoridades ministeriales agilizar las investigaciones de los hechos.