Astillero. Los verdaderos dueños. Julio Hernández López
Es probable que solamente quede en el ruido mediático de ocasión, sin mayores consecuencias judiciales, pero en las horas políticas posteriores al martes turbulento (caracterizado […]
Es probable que solamente quede en el ruido mediático de ocasión, sin mayores consecuencias judiciales, pero en las horas políticas posteriores al martes turbulento (caracterizado por la renuncia del secretario Carlos Urzúa y la detención del penalista Juan Collado) han aparecido, en un escaparate que combina escándalo con amago, los nombres de los ex ocupantes de la silla presidencial que están en las antípodas del registro político obradorista (aunque frecuente es la frase de que los extremos se juntan).