Agoniza la protesta de la CNTE. El asalto a la razón. Carlos Marín
Inimaginable hace pocos días, la protesta de la CNTE contra la reforma educativa se ha venido desinflando hasta dar signos evidentes de agonía. Por ser […]
Inimaginable hace pocos días, la protesta de la CNTE contra la reforma educativa se ha venido desinflando hasta dar signos evidentes de agonía. Por ser impopular y atentatorio de los derechos de los niños a una mejor enseñanza, el movimiento, simplemente, no prendió. En sus pataleos recientes, los maistros, lejos de retomar la Plaza de la Constitución (perdida para la causa, porque a partir de hoy será el mayor centro de acopio nacional para los damnificados de los siniestros meteorológicos), el movimiento se degradó aún más con los provocadores gritos de descalificación contra el dirigente de la mayor facción opositora: la sección 22 de Oaxaca.