Los desafíos para dejar de lado la política cortoplacista

En el mundo, la única constante segura que se tiene es el cambio, sin embargo, a lo largo de los años los cambios se han vuelto cada vez más frecuentes, ocurren con mayor velocidad y tienen un mayor alcance e impacto con efectos en la manera de vivir, comunicar, interactuar e incluso hasta de pensar de las personas.

En México no somos ajenos a los riesgos, desafíos y tendencias que ocurren a nivel mundial, por lo que se vuelve imprescindible generar políticas públicas con una visión global y a largo plazo, dejando de lado, por lo menos parcialmente, la política cortoplacista para trabajar en aquellas situaciones a las que se enfrentará la sociedad en el futuro, tratando de equilibrar el piso para evitar una mayor desigualdad a la que hoy en día se tiene, sin atentar con el desarrollo y crecimiento que los cambios puedan traer consigo.

Uno de los grandes retos es la exigencia de la ciudadanía tanto a los gobiernos como a las empresas para impulsar políticas que sean amigables y procuren el cuidado y protección de los recursos naturales y el medio ambiente, a la par de ser transparentes y éticos en su actuar.

Sin embargo, un factor que parece difícil de romper y se contrapone para poder conseguir las exigencias mencionadas anteriormente, es la cultura consumista que hoy en día envuelve a la sociedad, prefiriendo aquellos productos o servicios de menor costo, muchas veces desechables, pero con capacidad de satisfacción inmediata, a aquellos que pueden ser más sustentables y con mayor beneficio social, aunque sus procesos de adquisición o elaboración sean más lentos o costosos.

De ahí la complicada tarea del quehacer político para estructurar y sentar las bases para la creación de planes o programas de gobierno con esta visión a largo plazo que permita definir más allá de las metas u objetivos, la visualización del país o estado que se quiere lograr y empezar a promover la elaboración de las políticas públicas necesarias.

En el mundo se visualizan seis tendencias globales en las cuales varios especialistas, investigadores, académicos y líderes coinciden: i) Desarrollo de tecnologías disruptivas e inteligencias artificial; ii) Escasez de recursos naturales; iii) Transformaciones demográficas, entre las que se encuentra el envejecimiento de la sociedad iv) Concentración urbana; v) Cambio climático; y vi) Ciudadanos globales y migración.

Para hacer frente a estas tendencias el mundo actual requiere que se adopten nuevos modelos económico-políticos, donde deberían de involucrarse tanto el estado y el sector privado como la ciudadanía, para poder apostar por un futuro más sostenible y estar preparados para los acelerados cambios que el mundo tiene y tendrá de ahora en adelante gracias a la globalización, permitiendo identificar aquellas situaciones que podrían no ser necesariamente benéficas para la sociedad y así tener la capacidad de modificar el rumbo para llegar aquellas situaciones deseables que se buscan alcanzar.