×

Busquedas Populares


×

Opinión



Secciones




Ignorantes y arrogantes Fernández Noroña y la presidente

Por Héctor Parra - 04/11/2024

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Códice Informativo, y solo son responsabilidad del autor.

Peligrosa la ignorancia y arrogancia que muestran el presidente de la mesa directiva del Senado de la República y la presidente de la República, ante […]

 Ignorantes y arrogantes Fernández Noroña y la presidente

Peligrosa la ignorancia y arrogancia que muestran el presidente de la mesa directiva del Senado de la República y la presidente de la República, ante las resoluciones judiciales.

Pretenden saber más de Derecho Constitucional que los expertos y Doctos en la materia. Se resisten a cumplir con el Estado de Derecho que les impone la misma Constitución. Insisten en hacer prevalecer los criterios políticos y pisotear las resoluciones judiciales.

El senador hace énfasis en que ellos y el Poder Ejecutivo ya son el Poder Supremo y están sobre las sentencias de la SCJN.

Mientras que la presidente Claudia Sheinbaum insiste en que el pueblo ya decidió y 8 ministros y ministras no pueden estar sobre esa decisión. Además, amenaza y advierte en la mañanera que “ya están preparados, que su gobierno ya tiene un plan, independientemente de cómo voten los ministros y las ministras”. Solo le faltó decir que tiene su “plan C”.

El escenario político y jurídico se crispa por la desobediencia, ignorancia, tozudez y arrogancia de los políticos.

El problema va más allá del “simple pleito mediático por el control de poder”.

Es romper con el Estado de Derecho agudizando la crisis constitucional emprendida por quienes tienen la obligación de cumplir y hacer cumplir las leyes y las sentencias de las autoridades judiciales; pésimo ejemplo para la sociedad en general, reflejo del autoritarismo que les caracteriza y se muestran reacios a sujetarse al cumplimiento de las sentencias.

Rebeldía injustificada de la ignorancia manifiesta cobijada por el autoritarismo. Con el ejemplo que “imponen” las autoridades cualquier ciudadana o ciudadana se puede oponer a pagar impuestos, poniendo como ejemplo la conducta de las mismas autoridades.

Esa es la pésima actitud de los ignorantes. Además, amenazan a quienes tienen la facultad de aplicar las leyes por cumplir con su responsabilidad.

Fernández Noroña insistió en que, decida lo que decida este martes el Pleno de la SCJN, la elección de personas juzgadoras se va a realizar el 1 de junio de 2025, tras advertir que se analizan los posibles escenarios y se dará una respuesta firme a lo que resuelvan los ministros del máximo tribunal ¡Clara amenaza o advertencia!

El senador petista que se pasó a Morena para poder presidir la mesa directiva reiteró -vaya estupidez- que la Corte no tiene facultades para quitar o cambiar artículos de la Constitución, como pretende en su proyecto el ministro Juan Luis González Alcántara Carranza y acusó a la SCJN de romper el equilibrio de poderes y pretender plantear la supremacía del Poder Judicial, lo que es inaceptable. Siempre porro el legislador.

Y abundó en su agresivo planteamiento al afirmar que: “Es el colmo de la arrogancia, de la soberbia y de la irresponsabilidad. Para nosotros es irreductible nuestra posición, no nos vamos a echar para atrás, se va a elegir a las personas juzgadores, es un mandato popular, pero para nosotros permitir que 8 personas estuviesen por encima del soberano, que es el pueblo y de los Poderes de la República, es condenar a la patria a ninguna posibilidad de transformación. Que pase lo que quieran, nosotros no nos moveremos un milímetro de la elección de personas juzgadoras, este país ya abrió camino”. Postura abiertamente irreflexiva, agresiva y radical de un ignorante que hace peligrar la Estado de Derecho.

Luego, el senador tontamente afirmaría lo mismo que Claudia Sheinbaum, diciendo que la 4T tiene un plan acordado para responder a la Corte en caso de que invalide parcialmente la reforma judicial.

El ignorante y belicoso senador no es capaz de distinguir entre su nuevo partido y su función como presidente de la mesa directiva del Senado. Así de bárbaros, truculentos, irresponsables, arrogantes, ignorantes y arbitrarios.

De las declaraciones de estos políticos se aprecia que actúan de forma coordinada, aunque no se sabe si la presidente sigue órdenes de los legisladores o estos de aquella.

Dado que la agenda política la han impuesto en los últimos días los legisladores de Morena, todo hace suponer que Claudia Sheinbaum se sujeta a los “leguleyos” de los legisladores, quienes a su vez se subordinan a la línea política que les dejó López Obrador. Son un desastre como funcionarios públicos.

Lo cierto que, mañana martes 5 de noviembre -día de las elecciones en los EUA- el pleno de la SCJN estará analizando, estudiando y votando en cumplimiento a sus obligaciones constitucionales y legales, la sentencia que decidirá judicialmente el rumbo de las reformas constitucionales que desmadejaron al Poder Judicial de la Federación.

La soberbia de la ignorancia hace peligrar aún más el Estado de Derecho en México.

Tan sencillo que debe ser, en su caso, atender el resultado de la sentencia de la SCJN. Cometieron errores legislativos, eso es más que obvio; entonces, a corregirlos y se termina el conflicto.

¿Para qué desobedecer las resoluciones del Tribunal Constitucional? ¿Para qué la altanería de los ignorantes?

Tal vez esa sea una de las razones, la ignorancia, acompañada de la soberbia y la urgencia de arribar a la “dictadura blanda”; que no haya más que los Poderes Ejecutivo y Legislativo, doblegando al Poder Judicial, disminuyendo sus atribuciones. Eminentemente inconstitucional, rompen el equilibro de Poderes que mandató el Constituyente de 1917.

Sin embargo, el Poder Constituyente -diputados, senadores y legislaturas- no puede vulnerar los derechos humanos plasmados en la Constitución y en los Tratados Internacionales suscritos por el Estado Mexicano.

Las y los ministros lo único que harán es defender la Constitución, mientras que los otros defienden sus privilegios.

Héctor Parra Rodríguez

Héctor Parra


Otras notas



De nuestra red editorial