Pago de deuda o inversión pública: dilema de los estados
El mayor reto que enfrentan actualmente los estados es encontrar un equilibrio entre los recursos que se destinan a pagar la deuda y los recursos para la inversión pública, pues cargar hacia un lado la balanza podría generar un estancamiento de la economía local,
A nivel nacional, el pago de deuda pública se ha convertido, aparentemente, en una prioridad para las distintas entidades federativas, pues, de acuerdo con datos del Inegi, las administraciones estatales han destinado casi el doble de recursos a este rubro en comparación con lo que han dado para la inversión productiva.
De acuerdo con el Inegi, las entidades erogaron 141 mil 881.4 millones de pesos para deuda pública, contra 62 mil 414.09 millones de pesos para inversión pública.
Los datos podrían parecer positivos en un principio, dado que esto sería muestra de que las entidades están enfocadas a solventar los problemas de deuda que enfrentan, sin embargo, el hecho de que la inversión se vea menoscabada es un signo de alarma, pues esto podría tener un impacto en las economías locales.
El año pasado, la Secretaría de Hacienda prendió los focos de alarma sobre 10 entidades por endeudamiento público: Baja California, Chihuahua, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Quintana Roo, Sonora, Veracruz y Zacatecas fueron colocados en foco amarillo; solo Coahuila fue la entidad que se colocó en foco rojo y a la que se le prohibió contraer más deuda.
En 2017, Coahuila destinó 4 mil 371.3 millones de pesos a deuda pública, mientras que a inversión, solo 2 mil 634.08 millones de pesos, lo que significó una diferencia de mil 737.3 millones de pesos.
Bajo este escenario, se podría entender la decisión de las administraciones estatales para solventar sus problemas de endeudamiento aunque esto signifique destinar menores recursos para la inversión pública.
Sin embargo, como el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) destaca, este rubro es vital y así lo resalta el organismo en el documento “La importancia de la inversión pública”:
“La importancia de la inversión del sector público resalta cuando se aprecia un crecimiento importante en la infraestructura física, lo que contribuye a impulsar la actividad productiva del país y en el mejoramiento de las actividades de educación y salud”.
Sin duda alguna, el mayor reto que enfrentan actualmente los estados es encontrar un equilibrio entre los recursos que se destinan a pagar la deuda y los recursos para la inversión pública, pues cargar hacia un lado la balanza podría generar un estancamiento de la economía local, y un tropiezo a largo plazo para el desarrollo de las entidades.