Papa ofrece rezar por víctimas de la violencia
Es recibido en el Aeropuerto Internacional de Guanajuato por el presidente de México Felipe Calderón
El Papa Benedicto XVI ofreció este jueves rezar por las víctimas que ha cobrado la violencia en México así como por quienes más lo necesitan, al iniciar su primera visita pastoral al país y que culminará el próximo lunes.
El jerarca de la Iglesia católica arribó al Aeropuerto Internacional del Bajío, a las 16:14 horas, donde fue recibido por el presidente Felipe Calderón y su esposa Margarita Zavala.
Luego de escuchar el discurso de bienvenida del jefe del Ejecutivo mexicano –en el que resaltó que le recibe un pueblo que ha sufrido- Jospeph Ratzinger rememoró los pasos de su antecesor, Juan Pablo II y el amor que tenía por México.
Y conocedor de la violencia que vive el país, el Papa pronunció este mensaje:
“Señor presidente: en estos días pediré encarecidamente al Señor y a la Virgen de Guadalupe por este pueblo, para que haga honor a la fe recibida y a sus mejores tradiciones; y rezaré especialmente por quienes más lo precisan, particularmente por los que sufren a causa de antiguas y nuevas rivalidades, resentimientos y formas de violencia“, ofreció.
Al dar la bienvenida al Sucesor de Pedro, el presidente Felipe Calderón aseguró que le recibe un pueblo que ha sufrido mucho y que atraviesa por sucesos difíciles.
“México sufrió por ejemplo como pocos países los efectos de la crisis económica internacional, la más profunda que hayan visto las generaciones actuales en el mundo. México también ha sufrido la violencia despiadada y descarnada de los delincuentes el crimen organizado”, describó Calderón Hinojosa.
Sin embargo, añadió el jefe del Ejecutivo, México es un pueblo que está de pie.
“Está de pie porque somos un pueblo fuerte perseverante en la esperanza y la solidaridad porque somos un pueblo que tiene valores y principios que cree en la familia, la libertad, la justicia, la democracia”, resaltó.
En su discurso, Benedicto XVI pidió a los que sufren no perder la esperanza.
“Nadie queda excluido por su origen o creencias de esta misión de la Iglesia, que no entra en competencia con otras iniciativas privadas o públicas, es más, ella colabora gustosa con quienes persiguen estos mismos fines. Tampoco pretende otra cosa que hacer de manera desinteresada y respetuosa el bien al menesteroso, a quien tantas veces lo que más le falta es precisamente una muestra de amor auténtico”, dijo el Papa ante el presidente de México, la Primera Dama, Margarita Zavala, así como ante el arzobispo de Guanajuato, José Guadalupe Martín Rábago y el Nuncio Apostólico del Vaticano en México Christophe Pierre.
El Obispo de Roma se dijo contento de estar en Guanajuato al que, recordó, quiso venir desde su primer viaje el ahora beato Juan Pablo II.
“Ya sé que estoy en un país orgulloso de su hospitalidad y deseoso de que nadie se sienta extraño en su tierra. Lo sé, lo sabía ya, pero ahora lo veo y lo siento muy dentro del corazón. Espero con toda mi alma que lo sientan también tantos mexicanos que viven fuera de su patria natal, pero que nunca la olvidan y desean verla crecer en la concordia y en un auténtico desarrollo integral”, finalizó
Luego, saludó a la comitiva de Calderón Hinojosa, así como a obispos y arzobispos de México.
Antes de abordar el papamóvil, el primer Papa de origen alemán de este milenio saludó a cientos de personas que lo esperaron en el aeropuerto; para luego realizar un recorrido de 34 kilómetros hacia el colegio Miraflores, de monjas capuchinas, en León, lugar donde pernoctará.
