Corregidora realiza ‘Día del Caldo’ como parte de las fiestas de El Pueblito

Las tradiciones y conmemoraciones en honor a la virgen de El Pueblito continúan en el municipio de Corregidora. Luego de que el pasado domingo se realizó el tradicional “paseo del buey”, este lunes el animal fue sacrificado para dar alimento a cientos de peregrinos que llegan a venerar a la virgen. 

Se trata de un evento único en el estado, en donde el día domingo un buey arriado por los mayordomos recorre las principales calles de Corregidora mientras los habitantes le colocan verduras e ingredientes que lo sazonarán al ser sacrificado para dar de comer al pueblo.

Es una tradición de más de 200 años, y con ella se pretende compartir con los peregrinos un poco de alimento luego de días de recorrido en honor a la virgen; así lo explicó a Códice Informativo Alejandro Hernández Mata, primer mayordomo de la virgen del Pueblito.

“Es la parte de expresar la hospitalidad y la buena voluntad que tiene el pueblo de Corregidora, El Pueblito, para brindar un pequeño alimento a los peregrinos que llegan a visitar a la virgen al santuario y a la gente del mismo pueblo“, explicó.

Además del sacrificio del buey que recorrió las calles, los mayordomos -personas que aportan económicamente para las celebraciones- se encargan de agregar más carne para que todos puedan ser parte del festejo.

“En este caldo se van a repartir tres animales, tres toros, son alrededor de mil 200 o mil 300 kilos de carne, esperemos que alcance para 5 mil o 6 mil personas; adicional a ello, algunos integrantes de la mayordomía o tenanches, mayordomos o tenanches están también comprando carne, algunos meten 50 o 70 kilos más“, añadió el primer mayordomo.

Finalmente, Alejandro Hernández Mata manifestó que esta actividad se realiza cada año, y llegan a ella peregrinos de diferentes partes de Querétaro y de otras entidades. 

“Normalmente viene gente del estado de Guanajuato, del estado de Hidalgo, Michoacán; peregrinos de rancherías como Coroneo, Huimilpan, Santa Rosa Jáuregui; diario llegan peregrinaciones aquí y todos son bienvenidos a comer, pero es para todos los que quieran”, añadió.

Para esta tradicional comida se instalan mesas en las calles de Corregidora y en pequeños módulos se llevan cazuelas llenas de carne. Las esposas de los mayordomos y algunas voluntarias son las encargadas de repartir un plato a cada feligreses que lo solicitan; todo, en un marco festivo en el que hay música, fuegos pirotécnicos y la tradicional bendición de los alimentos.