Hipólito Mora y Luis Antonio Torres: dos versiones

Algunos periodistas parcializan la información y como bien lo dice “El Americano”, Luis Antonio Torres, apoyan a Hipólito Mora, conocido como el iniciador de los […]

Algunos periodistas parcializan la información y como bien lo dice “El Americano”, Luis Antonio Torres, apoyan a Hipólito Mora, conocido como el iniciador de los grupos de “autodefensas” en el Estado de Michoacán, en tanto “El Americano” afirma que Hipólito recibe apoyo de la delincuencia organizada.
Literalmente “fuego cruzado de versiones”. Luis Antonio Torres, también conocido como uno de los iniciadores del grupo de las fuerzas rurales, tiene un grupo importante de lugareños armados hasta los dientes con fusiles del alto poder; al igual que Hipólito, líder que dirige otro grupo armado. Eso sí, ambos con el permiso y licencia del gobierno federal, puesto que estos grupos se comprometieron a “regresar la paz en la zona caliente” de Michoacán, cuyo centro principal de operaciones se ubica en Apatzingán.
Ante la oleada de delincuentes en Michoacán, hubo que alzarse literalmente en armas en contra de los delincuentes. Así nacieron varios “líderes ciudadanos” como José Manuel Mireles, Médico de profesión, Le siguieron “Papá Pitufo”, Estanislao Beltrán, Hipólito Mora y el mismo Luis Antonio Torres. Todos con el firme propósito de combatir a la delincuencia organizada que azolaba el Estado de Michoacán.
Todos estaban armados y sin permiso alguno para portar armas, de tal suerte que el gobierno federal no tuvo más remedio que otorgarles permisos temporales para el uso de armas de alto calibre. Unos como identificados como defensas rurales, otros como autodefensas. Los medios de comunicación enfocaron su atención en estos cuatro personajes, algunos tomaron con simpatía a estos “líderes” y eran entrevistados constantemente hasta hacerlos “famosos” por el arrojo y valentía de defender a su pueblo a cambio de su vida.
Como por arte de magia, la delincuencia organizada desapareció, al menos no volvieron a ser mencionados, dado que las fuerzas rurales los expulsaron y recobraron infinidad de propiedades que estaban en poder de los delincuentes. Sin embargo hubo compromisos con el gobierno federal, que entregarían poco a poco las armas una vez que la delincuencia fuese diezmada. Y así empezaron las resistencias. Ahora se matan entre ellos por adquirir mayor poder y se acusan ¿A quién creerles? Los medios ante la encrucijada de ¿A quién apoyar como sus “protegidos mediáticos”?
Hoy día Juan Manuel Mireles permanece en la cárcel por resistirse a entregar las armas. “Papá Pitufo”, entró en conflicto con Mireles; y Torres contra Mora. Parece que se olvidaron del la finalidad de los grupos de autodefensa y el conflicto de “intereses” fue entre ellos. Algunos medios de comunicación se dedicaron a promover a unos o a otros, le dieron espacios en la radio y la televisión y eso ahondó las diferencias, las acusaciones entre ellos a voz en cuellos, incluso Hipólito era entrevistado en plena balacera cuando falleció su hijo. Total fracaso de los autodefensas a grado tal que ya se les liga, entre ellos mismo con la delincuencia organizada; otros que dejaron a estos últimos para buscar protección como autodefensas. La fórmula, después de todo no fue muy buena y el “poder” los corrompió.