UAQ organiza conversatorio para que niñas, niños y adolescentes contribuyan a crear cultura de paz
Como parte de las actividades que organiza la Coordinación de Cultura de Paz, se gestionó el conversatorio “Participación de niños, niñas y adolescentes como elemento para fomentar la Cultura de Paz” impartido por el docente e investigador, Luis Manuel Pérez Galván
Foto: Archivo
La UAQ organizó un conversatorio para promover la participación de los niños, niñas y adolescentes en la sociedad, con énfasis en que ésta contribuya a la creación de una Cultura de la Paz desde el ámbito escolar.
Como parte de las actividades que organiza la Coordinación de Cultura de Paz, se gestionó el conversatorio “Participación de niños, niñas y adolescentes como elemento para fomentar la Cultura de Paz” impartido por el docente e investigador, Luis Manuel Pérez Galván.
El docente y coordinador de la maestría en Educación para la Ciudadanía, de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y miembro del Observatorio de Convivencia Escolar Universitario; señaló que es primordial comprender la participación de las y los estudiantes como parte de sus derechos fundamentales.
A nivel jurídico y normativo la participación es derecho intrínseco a todas y todos los ciudadanos, sin embargo dentro de las escuelas existe una marcada tendencia a su limitación:
“La participación en el ámbito de la escuela es dirigida y acotada por los docentes, de entrada la escuela limita a los niños, niñas y adolescentes” declaró, Pérez Galván.
Para el especialista en derecho y psicología infantil, es primordial reconocer a la participación como un derecho facilitador que forma parte de un proceso que ayudará al niño, niña o adolescente a acceder otros derechos fundamentales.
Luis Manuel Peréz, ha encontrado que los estudiantes responden mucho mejor a actividades lúdicas o fuera del aula, y que por el contrario tienen una respuesta negativa ante cualquier situación que los deje en evidencia o suponga un riesgo a ser reprendidos frente a sus compañeros.
Partiendo de esa visión construir planes que coloquen al alumnado como eje para la creación de cualquier ejercicio de participación en las aulas, a través de escucharlos y reconocer aquellas actividades que genuinamente los motivan más allá de una participación forzada o condicionada a una calificación.
