Lechedevirgen Trimegisto regresa a los escenarios con una reflexión sobre la vida y la muerte

«Una lucha interna contra lo inevitable y la eterna paradoja entre la felicidad/angustia de estar vivo/muriendo» es la premisa de ‘Amanecer: Anatomía de lo terminal’ el performance que el artista Lechedevirgen Trimegisto (Felipe Osornio) presentará este sábado 29 de julio, en punto de las 20:00 horas, en el Museo de la Ciudad. Se trata de una obra que marca el regreso a los escenarios del artista tras su recuperación de una operación de transplante de riñón, que estuvo precedida por una década de enfermedad renal crónica.

En entrevista para Códice Informativo, Osornio explicó que su trabajo está profundamente influenciado por la condición clínica que lo llevó a estar cerca de la muerte, sin embargo su reflexión va más allá de la enfermedad y «tiene que ver con una conciencia más profunda, con madurar sobre ciertos aspectos y a entender las verdaderas prioridades», agregó que su nuevo performances está basado en tres puntos: nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, el peligro del olvido, y la paradoja de, al vivir, estar también muriendo.

Las situaciones personales que llevaron a Osornio a esta reflexión también produjeron un cambio en su obra artística, «mi trabajo se ha caracterizado por ser transgresor […] más dirigido a la cultura queer y el postporno, preocupado también por la homofobia […] lo cierto es que a la enfermedad que tuve, o a cualquier enfermedad, no le importa si eres homosexual o si tienes una postura al respecto. Yo sé que hay luchas y no las desacredito, deben continuar […] no es que haya dejado de lado esa cuestión política, sino que pienso que la verdadera consciencia política se desarrolla cuando uno entiende la noción entre la vida y la muerte» explicó.

Sobre lo que se podrá ver en ‘Amanecer: Anatomía de lo terminal’, el artista de performance detalló que será algo distinto a los actos que ha realizado anteriormente, donde realizó acciones que implicaron intervenciones a su cuerpo, esto debido a temas de salud, y se enfocará, más bien, en tratar de provocar en el público la experiencia terminal que vivió, sin que las personas tengan que pasar necesariamente por esta. «Ahora lo que se puede esperar de mi trabajo tiene que ver con […] cuestiones que no son superficiales, es un trabajo todavía más profundo que antes. Pienso que ahora para hacer arte yo necesito de verdad tener algo muy importante que comunicar. Lo que sí se puede esperar es mucha estética con insectos y con cosas de la naturaleza porque para mi es la gran metáfora, la naturaleza».

La entrada al performance es libre hasta agotar el cupo.