Mexicanos realizan boicot y no cruzan frontera de Tijuana a EEUU para comprar

EFEMEX

Los cruces fronterizos de San Ysidro y Otay, en el noroccidental estado de Baja California, recibieron hoy sensiblemente menos mexicanos que los que habitualmente van a EE.UU. a comprar, luego de que se impulsara un boicot en redes sociales, constató EFE.

Aunque no se han proporcionado cifras oficiales de los automovilistas y peatones que atravesaron la frontera a través de las dos garitas de Tijuana, la ausencia de miles de estos fue notable.

Particularmente durante las siete horas que se determinaron para el boicot, que en redes sociales se promovió con la etiqueta #UnasHorasporMéxico.

Aunado a ello, se llevó a cabo una marcha en contra de los incrementos en los precios de las gasolinas y la privatización del agua en Tijuana que arribó hasta el cruce de San Ysidro, por lo que las autoridades estadounidenses cerraron algunas horas el paso.

De esta manera, la garita de San Ysidro estuvo desierta buena parte del domingo, mientras que en la de Otay no se registraban más de treinta vehículos haciendo cola para cruzar al vecino del norte.

El presidente de la Cámara de Comercio de Tijuana, Gilberto Leyva Camacho, comentó a EFE que todavía no se tiene conocimiento de la magnitud del impacto del boicot en los comercios del sur de California.

Leyva Camacho agregó que lo que sí mostraron los tijuanenses es que “cuando se trata estar unidos, la ciudadanía responde”, para luego establecer que es importante demostrar al mercado estadounidense “que no somos sus enemigos, sino sus aliados, y que tanto nos necesitan ellos a nosotros como nosotros a ellos“.

Asimismo, destacó que hay un intercambio comercial de muchos millones de dólares de lado a lado de la frontera.

Según información oficial, en la garita de San Ysidro se estima que más de 30 millones de vehículos cruzan anualmente, y unas 20.000 personas lo harían a pie a diario.

Leyva Camacho por su parte deseó que el boicot “sirva como un escarmiento” hacia algunos estadounidenses “que nos tratan como personas de segunda“.

Pidió que los países estén “en iguales circunstancias” y anotó que de continuar el Gobierno de Estados Unidos amenazando con “poner trabas o atacándonos, iremos por más“.

En este sentido, adelantó que hay propuestas de no comprar en centros comerciales de origen estadounidense como Walmart o no consumir Coca-Cola.

México y Estados Unidos se encuentran en un momento tenso de la relación bilateral por el tono agresivo con la nación latinoamericana del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que pretende endurecer el control migratorio, construir un muro en la frontera y hacer que México lo pague y renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).