Liconsa abrirá cinco nuevas lecherías en Querétaro antes de que termine el año
La idea es que den servicio a mil 500 beneficiarios más, que se unirán a los 85 mil que ya se atienden actualmente en los 130 puntos de venta
Antes de concluir el año abrirán en el estado de Querétaro cinco lecherías de la empresa Liconsa en los municipios de Querétaro, Pedro Escobedo y Jalpan de Serra, en las que se dará atención a un aproximado de mil 500 personas en condición de pobreza, dio a conocer Leodegario Ríos Esquivel, gerente de Liconsa.
Actualmente en el estado hay un universo aproximado de 85 mil beneficiarios en 130 puntos de distribución, quienes adquieren este producto a un costo de 5.50 pesos el litro, a diferencia de un litro de leche comercial con valor de más de 15 pesos. En cada lechería que se abrirá se estima comenzar con 300 beneficiarios, para al cierre de año contar con dos mil en éstas.
“Hace unos días que vino el secretario Luis Miranda se generaron ciertos compromisos, entre ellos la apertura de cinco lecherías antes de que termine el año, ya nos dimos a la tarea, estamos a la espera de la autorización. La primera en La Versolilla, en Santa Rosa; Escolásticas, en Pedro Escobedo; Zoyapilca, Jalpan de Serra”, dijo.
En estos meses, personal de Liconsa está haciendo entrega de tarjetas a los más de 80 mil beneficiarios a fin de garantizar que el próximo año estas personas no se vean afectadas por recortes y reciban el producto al mismo costo que este 2016.
Ríos Esquivel destacó que en la delegación Liconsa Querétaro se atiende a 26 estados de la República, no sólo Querétaro, donde diariamente se producen un millón de litros de leche para atender a todos los beneficiarios del programa Liconsa y Prospera.
En el estado, de las 130 lecherías que hay a la fecha, el 48 por ciento está en la capital y otra parte en San Juan del Río, además de la Sierra Gorda; la lechería más grande está en San Juan del Río con cinco mil beneficiarios.
Liconsa Querétaro fue auditada la semana pasada para pasar de la certificación ISO 9001-2008 a la ISO 9001-2015; en esta revisión se revisaron desde el proceso de producción, hasta la calidad, inocuidad y la entrega del mismo a la población.
“Se revisa todo, ellos lo manejan con no conformidades o insatisfacciones; con inocuidad efectivamente es que el producto no tenga ningún rastro, bacteria, moho, que la leche es muy susceptible, y el manejo mismo, recordemos que van empacados en una laminación, que si es expuesta a mucho calor o tiene humedad puede llegar mal el producto”, destacó.