“Van a tener un queretano gobernador del campo”: Pancho Domínguez en Peñamiller

De ser favorecido con el voto el próximo 7 de junio, Francisco Domínguez se comprometió con más de mil habitantes de Peñamiller a ser un gobernador de campo, pues exaltó que así como se sabe hacerse un nudo de corbata, también sabe sacar un becerro de la vaca o atender a los chivos.

En uno de los mítines más nutridos que ha registrado su campaña, hizo el compromiso de llevar al menos tres plantas tratadoras de agua, pues refirió que de antemano sabe que esa es una de las demandas históricas de la gente que vive a las orillas de la rivera del Río.

Las sillas que colocaron para los asistentes resultaron insuficientes, algo que resultaba complicado creer pues la comunidad Boquillas es una de las más recónditas y metidas entre los cerros que arropan la sierra gorda, sin embargo, la histórica sucursal roja se tiñó por unos instantes de azul.

“Esto va cambiar, porque van a tener un queretano gobernador del campo, que se llama Pancho Domínguez (…) aquí el compromiso con ustedes, vamos atender la rivera del Río que es una demanda añeja de todos ustedes, no puede ser posible, donde están las plantas tratadoras de agua, díganme donde se encuentran, donde limpian su agua”, dijo el panista.

Asimismo, anunció que de llegar a  ocupar el Palacio de la Corregidora harían un diagnóstico serio para trabajar en la conectividad de todas las comunidades con la cabecera municipal, pues indicó que a estas alturas no se puede concebir que haya una demarcación con carencia de caminos y conexiones viales.

El candidato blanquiazul reitero que eventualmente será un gobernador “callejero”, que recorrerá las calles junto a los ciudadanos para conocer de primera mano las necesidades que tienen en temas como salud y educación, pues no comparte la idea de sólo hablar de un Querétaro bonito y asistir a cortas listones para la foto.

También señaló que tiene muy presente que hace falta detonar los sectores comercial, ganadero, agrícola y minero en las 136 comunidades que conforman dicha demarcación, con le objetivo de acortar la brecha que hay entre la zona del semidesierto y zona metropolitana.

En un evento con estas características no podía faltar la hospitalidad y el buen sazón serrano, pues los asistentes pudieron degustar de un buen plato de carnitas con su buena dotación de tortillas, arroz y frijoles, bien acompañado de un vaso de refresco para desatorar la comida.

Con el atardecer iluminando la entrada a la sierra y el final del semidesierto, la música de banda y los corridos norteños marcaron la pauta para dar fin al primer día de actividades en la sierra gorda, por parte de Domínguez Servién, quien termino entusiasmado.